No he dejado de leer todo cuanto cada uno ha tenido necesidad de expresar respecto a este engendro de las mal llamadas elecciones democráticas, antes, durante y después de las mismas. Estuve tentado a sumarme con similares ponderaciones respecto a lo sucedido. Todas fueron agudas y condenatorias, y lo mío difícilmente aportaría algo más a todo lo dicho, por lo que opté por reflexionar y volcar mis análisis y conclusiones en la nota adjunta.
Desde que estoy habilitado cono ciudadano en 1951, participé en muchas elecciones, algunas formalmente incuestionables, pero muchas de dudoso perfil democrático. Creemos que el fraude está limitado al acto eleccionario, pero también es fraude conculcar las normas constitucionales que regulan la organización institucional del país, es fraude comprar políticos como si fueran futbolistas, es fraude utilizar el poder para manipular las conciencias de ciudadanos dependientes de la dádiva del gobernante de turno. La lista de fraudes similares es amplia y no creo oportuno extender esta nota detallándolos, pero lo que quiero decir es que esta enfermedad tiene raíces muy profundas y antiguas, a las que no le llegan nuestras expresiones condenatorias cerradas en sistemas electrónicos. Ruego disculpen mi sinceridad, pero creo que hay que hacer otras cosas más efectivas, algunas de las que pueden ser las propongo en mis conclusiones, sin que ello excluya el correspondiente debate cívico, tan ausente en nuestra diluida república de la actualidad.
EXPERIENCIA ELECTORAL OCTUBRE 2007
Para el análisis separo el proceso en tres partes: preelectoral, acto electoral y resultado electoral.
Preelectoral:
Los postulantes para presidente, fueron producto de elecciones en una alcoba matrimonial o autonominaciones.
La justicia electoral, anacrónica, incompetente y/o en connivencia con el poder, habilitó candidatos violando normas constitucionales.
Un inmoral uso de recursos y dineros públicos en la campaña electoral por parte del oficialismo.
La justicia electoral cerró los ojos a la existencia de candidatos legislativos o intendentes con causas judiciales.
La justicia electoral no controló el incumplimiento de los tiempos electorales previstos por las leyes vigentes.
La justicia electoral remitió muchos telegramas de citación de autoridades de mesas sobre la fecha de los comicios y porque no pensar que muchos otros directamente no los envió.
Acto electoral
Muchísimas mesas se constituyeron tarde por falta de autoridades de las mesas, generando largas colas para votar, agravado por la absurda cantidad de listas existentes, que insumía excesivo tiempo a los electores para seleccionar y formalizar su voto.
Falta de fiscales de la oposición en muchas mesas electorales.
Robo sistemático de boletas de la oposición, que solo fue posible denunciar en las que estas tenía fiscales.
Ante la falta de boletas y ante la denuncia del elector, las autoridades de mesa en muchos casos sugerían votar a otro candidato.
Difusión del triunfo de los candidatos oficialistas, mientras los comicios aún no habían cerrado.
Escrutinios sospechados de fraudulentos, en muchas mesas electorales.
Demora injustificable en la comunicación de los resultados electorales.
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¿QUEDA ALGUNA DUDA SOBRE LA FRAUDULENCIA DEL PROCESO ELECTORAL?
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EL SEGUNDO COROLARIO DE LAS SABIAS LEYES DE MURPHY DICE: “SI HAY UNA POSIBILIDAD DE QUE VARIAS COSAS SALGAN MAL, SALDRÁ MAL LA QUE CAUSE MAYOR DAÑO”. Se ha cumplido, salió el mayor daño, la continuidad del autoritarismo y el populismo degradante.
Resultado electoral
El gobierno utiliza el porcentaje obtenido por la mitad femenina del matrimonio presidencial monárquico, resultante de una mañosa ley electoral menemista, como si casi la mitad del país la ha votado. Es oportuno acotar que la denostación de la década del noventa, solo es utilizada para el discurso tramposo, pero mantiene y es usufructuario de legislaciones y prácticas de esa época en la que fueron partícipes solidarios, de todo lo que le sirve para construir poder, como los decretos de necedad y urgencia, emergencia económica y nociva ley electoral, como así también de las oprobiosas prácticas de manipulación de jueces venales. La falsedad del discurso populista es incontrastable.
La realidad es que solo la votó el 31.93% del total del padrón electoral y que de los 8.650.990 millones, el 35.42% fue aportado por los argentinos que viven en el 11% de la superficie total del país, la Provincia de Buenos Aires, donde la corrupción política que todos conocemos, aumenta incesantemente con los métodos kirchneristas.
El 67,04% de los votos de dicha provincia, fue aportado por el Gran Buenos Aires, donde la estructura histórica del peronismo sigue vigente y es dominada por vitalicios intendentes y viejos punteros políticos que se han “cambiado”, los mismos sometidos de siempre al caudillo de turno, ayer Menen/Dualdhe, hoy Kirchner. Los votos del citado cinturón fueron el 23.75% del total de votos que obtuvo la “cambiada” electa.
Si estimamos una población en todo el país de 38 millones de habitantes, los 8.650.990 equivalen al 22.77% y los 3.064.486 que la votaron en Pcia. de Buenos Aires, el 8,06%. Vale esto decir que una minoría paupérrima, impone al resto de la población del país, los candidatos que solo se acuerdan de ellos cuando necesitan sus votos. Vale agregar las parodias de parlamentos nacionales y provinciales, dominados por oscuros personajes, no se los puede llamar legisladores, que han abdicado el mandato otorgado por los ciudadanos, a favor del presidente monárquico. ¿Es el nuestro un país federal?
Conclusiones
El kirchnerismo, en el escenario y con los resultados descriptos, emerge con más poder al lograr ampliar su mayoría en las cámaras legislativas y mayor dilución de la oposición. Sin dejar de reprobar la repugnante metodología que utiliza el gobierno para ejercer su mandato, rayano con el cesarismo, lo más grave es la falta de programas a futuro, que seguramente nos llevará a situaciones muy críticas y peligrosas para nuestra sociedad y el destino del país. Toda la sociedad debe iniciar ya mismo una fuerte acción para modificar la situación, antes de precipitarnos al vacío.
Si limitados medios de comunicaciones que denuncian y enjuician públicamente las irregularidades del gobierno, no logran resultados eficaces para obtener un cambio, difícilmente nuestro ponderado accionar por este medio electrónico, circunscripto a una reducida participación de habitantes y una gran mayoría de ellos irresponsablemente despreocupados de los problemas del país, podrían concretar resultados sino las proyectamos con acciones de difusión pública. Por ello someto a la consideración de todos, las propuestas que expongo:
Red Ciudadana Argentina, es una ONG que bajo la sacrificada, dinámica y esclarecedora conducción de Adriana Guanzetti, que realiza en forma personal lo que otras similares de exposición pública reconocida no hacen. Debería promoverse la integración de una red de ONG afines en todo el país, con sus responsables máximos definidos y objetivos comunes previamente acordados y mensajes homogéneos, que generen una fuerte exposición de acciones públicas.
Objetivos sugeridos
Las recomendaciones emanadas de la Mesa de Diálogo Argentino para la reforma política, que surgieron después de la crisis del 2001.
Los actos electorales regularmente se ejecutan en los centros educativos. Como hemos visto en la experiencia pasada, uno de los factores más fraudulentos denunciados anticipadamente por Adriana Guanzetti, es la inseguridad que genera el accionar dudoso de la Justicia Electoral para la convocatoria de las autoridades de mesas. Porque no considerar las escuelas con todo su personal directivo y docente, reforzado con el aporte de personal del la justicia, como estructura base para la conformación de las mesas. La dirección de la escuela asumiría como la máxima responsable de la organización de los comicios en ese centro, y 60 días antes la justicia electoral debería convocarla y otorgarle la autoridad y responsabilidad de su ejecución, como así también brindarle todo el apoyo informativo e instructivo para satisfacer el cumplimiento estricto de las normas electorales. Deberá reconocerse al personal afectado, una remuneración acorde con el tiempo insumido en la tarea y la jerarquía de la misma. Con esto se eliminaría totalmente la falta de autoridades de mesa, como viene sucediendo en todas las elecciones.
Todos hemos visto en el cuarto oscuro, la masiva oferta de boletas de las últimas elecciones, que no es diferente a lo sucedido en anteriores elecciones. También vimos los resultados de ellas, en la que la mayoría de ellas han obtenido paupérrimos porcentajes. Algunos fueron nuevos participantes, pero muchos de ellos son históricos que repiten elección tras elección los mismos o menores porcentajes. Todos sabemos que la ley electoral retribuye un importe monetario por cada voto obtenido. Yo por lo menos y seguramente otros, pensamos que hay quienes su real interés está atado al rédito económico que le generan los votos que obtienen. Porque no buscar que se modifique la ley, de modo que el partido que en dos elecciones sucesivas no logren superar el 3% de los votos, en su tercera presentación no recibirán pago alguno del erario público. Además, los que integran dichas listas no podrán figurar durante dos elecciones, como integrantes de una nueva formación política, pero si podrán integrar listas existentes que hayan participado hasta la segunda elección sucesiva citada en el párrafo anterior. Seguramente esto ayudará a ir reduciendo la grosera cantidad de listas participantes.
Eliminar por ley en todo el país las leyes de lemas o similares disfrazadas con otros nombres.
Retornar al sistema que rigió en algún momento, por el cual los partidos que en un número a determinar de elecciones sucesivas, que no hayan superado el 3% de los votos, se le suspenderá la personería jurídica por un número de elecciones posteriores a determinar.
Acciones sugeridas
Someter hasta la saturación con e-mail a los legisladores nacionales y provinciales, con las propuestas de cambios electorales que se puedan efectuar con modificaciones o nuevas leyes, una vez que se han consensuado por todas las ONG participantes, después de un amplio debate.
Someter a todas las organizaciones empresarias claudicantes ante el autoritarismo del poder, a la saturación por e-mail, denunciado su interesada cobardía.
Realizar lo mismo con todas aquellas organizaciones de las fuerzas vivas del país de reconocida incidencia en el medio en que actúan, que asumen actitudes similares a la anterior.
Someter por el medio posible hasta la saturación, a todos los niveles de la justicia y de los fueros que fueren, cuando evaluamos parcialidad, incompetencia o connivencia con el poder, en sus actos de justicia.
Denunciar en todos los ámbitos por los medios posibles, todos los actos de corrupción, autoritarismo y falsedades emanadas del gobierno.
Sabemos de lo difícil que es superar el absolutismo que caracteriza a este régimen seudo democrático, pero no podemos quedarnos de brazos cruzados, porque ello no solo implica no poner freno al desborde, sino también cargar con algún grado de responsabilidad por lo que suceda.
Seguramente el debate superará mis propuestas, lo que es de desear, y se agregarán otras.
No tengo formación jurídica, por lo que desconozco si en lo expuesto he cometido errores de legalidad insalvables, pero el objeto de este mensaje no es transgredir el orden jurídico, sino expresar como ciudadano las preocupaciones por las reiteradas agresiones a las instituciones de la república.
EL QUINTO COROLARIO DE LAS LEYES DE MURPHY DICE: “Si dejamos que las cosas marchen solas, suelen ir de mal en peor”.
Saludos a todos,
Emilio Zuccalá
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