RENKOR

Rencor

La última vez que pelearon entre ellos nos hicieron pelear a todos. Y todos perdimos. Ni siquiera se salió con la suya el ganador de aquella descomunal porfía de tintes casi homéricos, que enajenó la cordura de muchos de los que parecían más cuerdos.
Porque el campo no ha obtenido, después de doblegar al gobierno, beneficio alguno en función de los precios internacionales de lo que exporta.
Y, en cambio, se ha hecho acreedor a una tal inquina rencorosa por parte del kirchnerismo, que éste prefiere a ojos vista aliarse con la sequía para vengarse, en vez de combatirla para evitar lo que sigue. Lo que sigue es desinversión, desempleo rural y hasta un conato de rebelión fiscal...
Conste, pues, lo siguiente: ningún gobierno puede ceder al estúpido prejuicio de creer sus cuentas pendientes con un sector, más válidas que el interés general, e incluso que el interés parcial. Se es gobierno, entre otras cosas, para olvidarse de sí mismo

LNP