lunes, 5 de abril de 2010

SOLOS Y EN SILENCIO


El Liberal - 05-Abr-10 - Opinión

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Solos y en silencio

por Pepe Eliaschev

Para marcar el 28º aniversario de la decisión adoptada en 1982 por la dictadura militar que encabezaba entonces Leopoldo Galtieri, la Presidenta hizo un acto en Ushuaia, muy cerca de su predilecto Calafate, donde pasó el largo reposo de Semana Santa.

Allí, en territorio fueguino, pronunció otro de sus encendidos discursos, despotricando contra Gran Bretaña y las Naciones Unidas.

Este ataque retórico tuvo lugar simultáneamente a dos abrumadoras constataciones para la Argentina. La primera de ella fue que el presidente de China, Hu Jintao, visitará América latina en abril, pero sus países elegidos son Brasil, Chile y Venezuela.

Razones obvias pero hirientes: Cristina Kirchner canceló el 19 de enero, a punto de embarcarse a Beijing, una súper programada visita de estado a China porque temía que el vicepresidente Julio Cobo se quedara al frente del Gobierno.
Esta semana también hubo que digerir que el hombre fuerte de Rusia, Vladimir Putin, hizo una visita oficial a Venezuela, mientras que la Argentina deberá conformarse con que el presidente Dimitri Medvédiev aproveche la inminente cumbre Brasil-Rusia-China-India, prevista para dentro pocos días en la nación sudamericana, para hacerse una rápida visita de cortesía a Buenos Aires.

Marginada por China, claramente menoscabada por Rusia, la Argentina ahora denuncia de "colonialista" a Gran Bretaña. "Pretender soberanía a 14.000 kilómetros de distancia no es sostenible histórica, geográfica ni jurídicamente, ni por el sentido común. Es un ejercicio de colonialismo", dijo la Presidenta en el sur.

La acompañó simbólicamente Luis D'Elía, desde Buenos Aires, cuando, tras intentar acercarse el viernes a la embajada británica, aseguró a sus seguidores que "los ingleses no se podrán llevar ni un centímetro cúbico del petróleo de las Islas Malvinas".

Al desplante a China de enero, hay que añadir que la Argentina carece hoy de embajadores en Londres y también en Roma, mientras que la embajada en Moscú ha quedado vacante por enfermedad de su titular, recluido en San Juan hace ya meses.

Es posible que entre abril y junio, Cristina Kirchner consiga ciertas compensaciones.

Entre lo que hizo Cristina Kirchner respecto de Malvinas y lo que se supo este fin de semana sobre la actitud de la Casa Rosada en materia de clandestinidad de la información oficial, hay muchos enigmas que empiezan a resolverse, al menos parcialmente.

Los chinos le harían un espacio en junio para recibirla, y tal vez consiga la famosa foto con Barack Obama en la reunión del G20 convocada para fines de mes en Canadá.

Son gotas de alivio en medio de un aislamiento internacional silencioso pero difícil de negar, sobre todo si se lo compara con los logros de naciones vecinas.

El Ministerio de Economía ya no publica en internet los datos que muestran cómo gasta los recursos públicos y la Sindicatura General de la Nación (Sigen), principal ente contralor interno del Estado, eliminó de su sitio web en internet todos los datos que reportan sus informes de auditoría, con la insostenible excusa de "proteger datos personales".

Ahora, según reveló el diario La Nación, para obtener una copia de los informes de la Sigen, de libre disponibilidad desde por lo menos 1990, hay que pedirla formalmente por escrito, según estipula el decreto 1172 de 2003, firmado por Néstor Kirchner para permitir el conocimiento de datos del Estado, pero que incluye excepciones útiles a los jerarcas estatales para no divulgar datos comprometedores.

Un pedido formulado hace poco por la Asociación por los Derechos Civiles (ADC) y la organización no gubernamental Poder Ciudadano sobre el millonario presupuesto de propaganda oficial, fue rebotado por el jefe de Gabinete, Aníbal Fernández.

Alegó que "se deben proteger los datos personales de los medios en los que se cursan los avisos".

El Ministerio de Economía interrumpió desde el 20 de diciembre pasado la carga de datos nuevos en su sitio de Internet relativos a la ejecución del presupuesto nacional.

Hasta 2009 esa información clave solía actualizarse semana a semana, lo que facilitaba un seguimiento minucioso del reparto del dinero por programas y provincias.

Diputados y senadores que quieren monitorear la ejecución presupuestaria tienen que apelar a otras fuentes informativas, privadas, para lograr lo que buscan.

El diputado Claudio Lozano (Proyecto Sur) admitió que "hace tiempo que no se consigue la información por los canales normales y, por eso, debemos apelar a contactos que tenemos en distintas áreas de la administración para obtenerla de manera extraoficial".

En la Administración Nacional de Seguridad Social (Anses) las actualizaciones quedaron congeladas en diciembre para los legisladores de la comisión Bicameral que controla el manejo de los fondos previsionales.

Se trata de la caja principal con que se financia el Gobierno desde que los fondos previsionales fueron estatizados totalmente a fines de 2008. Lo mismo sucede con la ejecución de las obras públicas, ya que la más reciente actualización del programa Fonavi para construcción de viviendas es de septiembre de 2009, hace ya seis meses.

Aníbal Fernández responde cómo y cuánto le apetece, o sea casi nada, y es muy poco habitual que conteste afirmativamente a los pedidos de informes elevados desde el Congreso al Poder Ejecutivo.

Los legisladores opositores tienen que recurrir al mecanismo del decreto de acceso a la información, como cualquier ciudadano común, pero tampoco eso los lleva siempre a alguna parte. La ecuación cierra perfectamente para los gustos del Gobierno.

Retórica nacionalista para los reclamos internacionales, escasa inserción verdadera en los grandes escenarios del planeta y, fronteras adentro, un sistema de gestión cada vez más opaco, un cerrojo que consigna a la clandestinidad lo más importante que deben conocer los ciudadanos.

Esto se verifica a escasas semanas de los 200 años de "el pueblo quiere saber" de 1810.

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