DERROTA DE CHÁVEZ

PRIMERAS CONSECUENCIAS

DE LA DERROTA DE CHÁVEZ
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Por Carlos Manuel Acuña

No sería exagerado reconocer que para el gran público los esperados resultados de la elección venezolana mantuvo en vilo a buena parte de la opinión, aunque ésta no sopesara adecuadamente el contenido de lo que sucede. Sólo los mejor informados esperaban la derrota de la propuesta de reforma constitucional venezolana y ya cercano el comicio especulaban con una diferencia en contra del SI en un porcentaje del orden del cuatro o cinco por ciento.

Desde el mismo día que el ex ministro de Defensa, general Baduel, se pronunció días atrás en contra del proyecto de "Socialismo del Siglo XXI", cuyo contenido más concreto residía en los puntos básicos de la reforma y en el carácter indefinido de la permanencia de Chávez en ejercicio del cargo, comenzó a perfilarse la certeza del desenlace político que produciría el resultado electoral. Para ese entonces - y ya lo dijimos en un comentario anterior - la jugada chavista comenzó a resquebrajarse y a demostrar que el Presidente no había medido con corrección el riesgo que corría. Sobre todo, que su idea expansionista en determinados países del Cono Sur y la inspiración izquierdista que una victoria insuflaría a dirigentes proclives a posiciones de izquierda, podría detenerse y entrar en un terreno de debilidades progresivas que modificaría el escenario latinoamericano.

En efecto, lo ocurrido ahora se convirtió en una aguda señal de advertencia para las tentaciones en tal sentido pero además, puede ser, entre otros, un golpe de gracia para los planes de Evo Morales, el alineamiento del Ecuador con Correa y el peligro divisionista latente en Bolivia. Todo esto sufrirá un mayor desgaste con el correr de las horas, cuando la opinión pública se percate de determinados factores aún no enlazados lo suficiente como trazar un adecuado cuadro de situación.

En primer lugar, que en Venezuela se registró pese a las pasiones desatadas, alrededor de un 40 por ciento de abstención o no concurrencia, lo que en los hechos puede interpretarse que hasta simpatizantes de Chávez prefirieron no jugar la suerte del voto y alejarse del conflicto, con sus dudas o sus certezas. En segundo lugar, que la demora de varias horas en dar a conocer el resultado pese a la automaticidad del sistema, se debió a que la diferencia era mucho mayor que la anunciada posteriormente y que el NO ganaba por un porcentaje aproximado al 6 por ciento. En el medio, ocurrieron las negociaciones para que Chávez reconociera que había perdido, lo que sólo aceptó una vez que se acordó que esa diferencia no sería mayor al uno y medio de los sufragios. En los hechos, esto fue el resultado de distintas presiones, pero la más importante fue la que llevó adelante el general Báez que lidera de hecho, alrededor de un 50 por ciento de las Fuerzas Armadas. Del resto, únicamente un 25 por ciento constituido en gran parte por fuerzas policiales militarizadas y grupos especiales que responden a Chávez, no pudo pesar en la balanza, en tanto el 25 por ciento restante era partidario de una posición más drástica respecto de la presencia de Chávez en la Presidencia, en uno u otro sentido pero en porcentajes no bien determinados. Claramente, lo que se evitó fue una Guerra Civil que podría haber desbordado la situación e influenciar en aquellos países donde la presencia chavista es reconocible. Curiosamente, se trata de territorios ricos en reservas energéticas, detalle que añade un nuevo elemento a lo que ocurre y que aún no ha concluido.

Por dar un ejemplo, digamos que a mediados de este mes se juega casi definitivamente la suerte de Evo Morales, se aflojarán levemente las tensiones militares de la región y tendremos un Fin de Año con posibles nuevas opciones. Por supuesto, por su carácter, estilo y mesianismo, Chávez buscará por todos los medios de resarcirse de las limitaciones taxativas que le impone el resultado electoral, pero tratará de seguir adelante con el consecuente estado conflictivo que generará fronteras adentro de Venezuela, pues la mayoría militar de su propio país no desea la "exportaciones del Socialismo del Siglo XXI", que ha quedado rengo tanto en su desopilante contenido doctrinario cómo en los objetivos específicos, económicos y estratégicos que buscaba.

De ahora en adelante, excepto alguna jugada de alto riesgo que quiera ensayar, Chávez quedó acotado aunque todavía hay mucho terreno y tiempo por recorrer. Posee instrumentos legales para continuar con su idea, dinero suficiente para proseguir con el fortalecimiento militar, audacia para ensayar una acción internacional acordada con Irán y grupos operativos que avanzaron mucho más de lo que se supone en otros países. Siempre a título de ejemplo, el activista argentino D'Elía, que siempre apoyó nuestro gobierno, seguramente verá restringida la afluencia de fondos y otros recursos venezolanos que recibía hasta ahora. Tal vez - todo es posible en estas cosas - esa ayuda, por así llamarla, podría reforzarse en favor de la inestabilidad interna de nuestro país, aunque aquí, entre nosotros, podría revertirse poco a poco la visión distorsionada del pasado histórico inmediato, lo que constituye nada más que un instrumento de batalla jugado por el extremismo que nunca descansa. Por ejemplo, desde la Casa Rosada todavía se mantiene el proyecto
de detener a más civiles y militares y aplicar normas jurídicas pese a la inconstitucionalida d de éstas, para juzgarlos por genocidio o delitos que nunca cometieron. También podría darse que se considere, "delitos de lesa humanidad" los asesinatos, secuestros y otra case de atrocidades cometidas por la subversión de los 70 y continuados indirectamente por la declamatoria política y la inseguridad pública. Dicho sea de paso, aunque lo piensen, la decadencia política Argentina hace que hasta el momento, ninguna voz partidaria - es decir, representativa de los partidos políticos que se diluyen - se ha levantado para analizar estas cuestiones estratégicas que influyen en nuestras vidas, la de nuestros hijos y del futuro de esta Patria cuya sociedad enferma no reacciona.
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