El plan contra el campo que viene a ejecutar Fernández - de La Politica On Line
El plan contra el campo que viene a ejecutar Fernández
Carlos Fernández asumió en Economía para avanzar con el trabajo sucio que rehuyó Martín Lousteau. La idea es cruzar información de productores de la Afip con la base de datos de la Oncca y montar con la excusa del censo agropecuario, una persecución fiscal.
La estrategia de Néstor Kirchner es simple y se está ejecutando de manera inexorable: No ceder ante los reclamos del campo. Dividirlos, entretenerlos y perseguirlos. Todo funcionario que se ajuste a este plan de acción tiene el puesto asegurado, y hasta la posibilidad de una promoción. Por eso sigue Guillermo Moreno y se va Lousteau. ¿Pero qué es lo que vino a hacer el hasta ahora desconocido flamante titular de Economía?
El nombramiento de Carlos Fernández coincidió con la proximidad del fin de la tregua que el campo le dio al gobierno. Se trata de un peronista bonaerense con el perfil discreto y obediente que tanto agrada a los Kirchner. "Es un soldado, puede ser bueno o malo según la política que le bajen sus jefes", explicó a La Política Online un veterano dirigente peronista que conoce al flamante ministro de su paso por la provincia.
En rigor, Fernández ya venía desde su desembarco en la Afip, interesándose por la información tributaria de productores y empresarios del campo. Bagaje informativo que ahora se acoplaría al polémico "doble censo" que el Poder Ejecutivo planea hacer en el agro, denunciado recientemente por trabajadores del Indec y tomado por los representantes del sector como una manifiesta arma de presión.
Es así que la embestida oficial contra el campo "descubrió" en el lanzamiento de un censo agropecuario, una formidable herramienta de presión. El mismo llevaría como anexo, además del formulario del ente estadístico, un agregado de la Oficina Nacional de Control Comercial Agropecuario (Oncca), que conduce el pingüino Ricardo Echegaray. El resultado de este cuestionario, sería la presentación de una declaración jurada de los productores.
Y nada es casual. Etchegaray, que como Carlos Fernández y Guillermo Moreno se define como un soldado del kirchnerismo, desembarcó en el organismo de control agropecuario, luego que despidieran al correcto técnico de carrera José Portillo, que no comulgaba con los "usos" que el kirchnerismo quería hacer de la información confidencial que el Oncca tiene sobre los sectores del campo.
Con su honestidad brutal habitual, apenas desalojado Portillo, fue Guillermo Moreno quien se presentó en el Oncca y pidió el registro de los volúmenes y otros datos reservados del movimiento comercial de las principales exportadoras y productoras de grano de la Argentina. Enfervorizado como un chico afirmó: "!Esto es lo que necesitaba! ¡Por fín!", y se llevó la planilla.
El censo
Ahora, en el censo agropecuario, el kirchnerismo habría encontrado la herramienta para concretar la persecución fiscal que imagina. Esto lo denunciaron afiliados a ATE del Indec. Según su explicación, el Gobierno analiza que los censistas que visiten las unidades agropecuarias lleven no sólo la tradicional encuesta en la que se preguntan datos la producción, sino también una planilla de la Oncca que el productor debería firmar con el carácter de declaración jurada. El problema es obvio: la Oncca es un organismo de control y reparto de subsidios, mientras que el Indec tiene que proteger la identidad del encuestado.
Pero el dato fuerte aquí, es que quien debería aportar su experiencia a la coordinación de este operativo, es nada menos que el flamante ministro de Economía. Se trata de la creación de uno de esos dispositivos de control que tanto seducen al kirchnerismo, que combinan presiones con favores discrecionales.
Porque la Oncca, además de su tarea de control, también se encarga de repartir las "compensaciones" al campo. Esto es, del dinero que le sacan al agro vía retenciones o precios de corte –en el caso lácteo-, la Oncca "devuelve" una parte, con sus tiempos y a quien elije.
Fernández fue, según fuentes internas del ministerio de Economía y de la AFIP quien condujo hasta el día de hoy. Ya venía trabajando en el diseño de este "doble censo". "Ya venían marcando a los que apoyaron la protesta del campo. Ahora, la información de este censo la van a cruzar con los datos de la AFIP para desatar una cacería impositiva contra los productores" , explicó a La Política Online, una fuente de Economía.
El mismo dato surgió de una fuente de la agencia recaudadora de donde proviene Fernández: "Que Fernández fue el autor de la idea era sabido dentro de la AFIP y hasta lo confirmó gente de Lousteau. Pero es algo que viene desde antes, porque Fernández lo imaginó cuando estuvo en la Secretaría de Hacienda y se lo hicieron llegar a Alberto Abad (el ex titular de la Afip), quien se negó a firmarlo".
Cómo se sabe, Carlos Fernández es un nombre que se ganó la entera confianza del ex presidente Néstor Kirchner, a quien, entre otras cosas, le formulaba los Presupuestos de la Nación durante toda su gestión.
La furia agraria
La bronca del agro por esta posibilidad no tardó en llegar. A pesar de que todas las voces consultadas concuerdan en la necesidad de realizar un censo en el campo, nadie confía en el Indec que intervino el secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, y sienten que desde el gobierno están mostrando sus armas para un "apriete" impositivo. Entre otras cosas, temen que recolecten también datos privados sobre los campos de soja y girasol.
"El censo es absolutamente necesario pero no de esta forma. Así, los productores van a tener que hacer el censo con la declaración jurada en la mano porque la AFIP podría cruzar los datos. Lo único que hace es poner nervioso a la gente del campo, por decirlo sutilmente", expresó Claudio Molina, presidente de la Asociación Argentina de Biocombutibles y experto en asuntos agrarios, a La Política Online.
La misma línea siguió Ulises Forte, vicepresidente de la Federación Agraria Argentina (FAA) quien cruzó este breve diálogo con este medio:
¿Qué saben del posible "doble censo" que planea el gobierno?
Tengo poca información. Lo que está claro es que hace falta un censo agropecuario para que quede claro quien es quien. Pero tiene que ser un censo serio no un censo Indec, porque con esto se violaría el secreto del censo. Si tiene que haber una declaración jurada del productor se pierde el secreto estadístico. Puede ser una trampa mortal para una persecución ideológica o se puede prestar para cualquier cosa.
¿Ustedes lo toman como una embestida del gobierno en caso de confirmarse ese censo?
Se tiene que asegurar el censo, pero uno técnicamente serio para que se publique y se sepa que no todo el campo es lo mismo.
Y teniendo en cuenta que llega desde la Oncca que dirige Echegaray ¿No agrava las dudas?
Más allá de quien lo maneja no puede ser, no tiene sentido. Si quieren hacer los dos controles los tienen que hacer en dos etapas, no puede ir un anexo es una locura. El censo es una cosa y la declaración jurada es otra.
La maquinaria del IndeK
La herramienta que el gobierno maneja para llevar adelante este censo es nada menos que el Indec. Allí aparece la tercera pata del aceitado circuito que se encargará de la presión impositiva. El circuito que integran Fernández, Echegaray y Moreno.
Puertas adentro del Indec, confirman: "Están trabajando sábados y domingos apurando el censo". ¿Por qué es esto? Porque la idea es salir ya mismo. Las autoridades del Indec adelantaron tres meses el censo agropecuario previsto para septiembre, por lo cual trabajan contra reloj para sacar a los encuestadores a la calle.
El diputado Claudio Lozano, seguidor desde el principio de la intervención oficial al Indec, habló con La Política Online y explicó los extraños –o ya no tanto- episodios que se dan puertas adentro del edificio de Diagonal Sur y Alsina.
"Se ha producido un desmantelamiento del equipo que trabajaba en el censo agropecuario, se ha desplazado a la mitad de los trabajadores que durante años se desempeñaron en ese programa y se ha llegado al extremo de levantar una pared para evitar cualquier contacto entre quienes seguirían teniendo tareas sobre este censo y quienes fueron desplazados. Esto está indicando que la intervención producida por Moreno, que forma parte del mismo dispositivo de poder de Echegaray, efectivamente está tomando cartas en el asunto para operar sobre el censo agropecuario" , reveló.
Sobre el censo, el economista de la CTA opinó que "se supone que un censo lo que tiene que brindarte es información. El problema que hay aquí no pasa tanto por el censo, que es total y absolutamente indispensable. Lo que uno puede tener es dudas sobre la seriedad con la que pueda manejarse la construcción de la información, habida cuenta de que tipos que son muy adecuados, importantes y serios en el tema, los que venían trabajando en este tema, son sustituidos por otros que en realidad no tienen ningún tipo de antecedentes" .
En cuanto al rol de la Oncca, el legislador nacional opinó: "Las cerealeras, los laboratorios productores de tecnología y de semillas, los pooles de siembra, los productores integrados a partir del proceso privatizador, los frigoríficos, los hipermercados y la industria de la alimentación en general son los beneficiarios de los apoyos y las compensaciones que entrega la ONCAA, pero nunca los productores y menos los productores más chicos".
Según explicó Lozano, durante el 2007, de los 1.500 millones de pesos que la ONCAA puso en compensaciones, "con sólo 10 empresas explicas más de la mitad".
Por último, consultado sobre la posibilidad de que sea Fernández el cerebro de este doble censo, el economista de la CTA argumentó que "no sería de extrañar porque es un hombre directamente vinculado a Kirchner y puede ser que esté operando en el esquema que trabajan Etchagaray, Moreno y De Vido. No sería raro que lo hubiesen involucrado para que desde la AFIP ponga la lupa para llevar adelante algún tipo de apriete sobre los productores" .
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1 comentario:
Creo muy acertado su análisis. Y me asusta el hecho de que se lleguen a concretar todos los pasos que Ud. enuncia.
Soy pesimista al pensar en la sociedad argentina, mas preocupada por el baile de Tinelli que por el futuro inmediato del pueblo argentino.
Esperemos que triunfe la verdad y la inteligencia.
Saludos
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