LA PRESIDENTE.. .
¡QUE PATÉTICO!
¡QUE PAPEL TRISTE QUE HACE!
En octubre del año pasado los argentinos votaron para elegir quien iba a liderar y conducir la Nación en los próximos cuatro años. Se impuso en las elecciones la esposa del presidente de ese momento: la Sra. Cristina Fernández de Kirchner. No triunfó por un amplio margen. Solo la votó el 30% del padrón electoral. Su campaña se financió presuntamente con miles de dólares de Venezuela.Pero en definitiva se impuso y los argentinos decidieron por ella.
Cuatro meses después los ciudadanos vemos alarmados y seriamente preocupados que no gobierna la elegida por el voto popular, sino que Néstor Kirchner continúa siendo el virtual presidente.
Cristina quedó convertida en una figurita de cartón pintado. En esta Argentina insólita, apareció una nueva forma de traicionar el voto popular.
Los poderes compartidos, las juntas de gobierno por ejemplo, siempre demostraron no ser eficaces ni adecuadas para la gobernabilidad de un país. Es conocido el hecho de que este matrimonio no es una sociedad conyugal precisamente, sino una sociedad política.
Una sociedad politica en la cual los actores tiene diferentes estilos y diferentes enfoques de la realidad argentina y la forma de encarar los múltiples problemas que amenazan e inciden en la actualidad y en el futuro del país. El poder debería concentrarse en una única persona, árbitro final de todos los conflictos e intereses del sistema
“En cualquier sistema político, cual es que el poder, en definitiva, no se comparte. Uno -y sólo uno - debe ser quien termine tomando las decisiones ejecutivas, más allá de la mayor o menor perfección de las reglas de toma de decisión y de la independencia de los poderes del Estado. Como energía que es, el poder compartido termina siendo menos poder y esto, en una situación de crisis, puede terminar alentando a ese otro gran demonio de la política que es la anarquía.” (ref.1)
Estas diferencias surgieron desde el principio de su gestión, pero se hicieron evidentes con toda su crudeza en el conflicto del gobierno con el campo.
“Néstor Kirchner es el dirigente político que más trabajó para vaciar de contenido y erosionar la investidura presidencial de su esposa. Desde el principio desarrolló en forma incansable, obsesiva y sistemática un operativo para condenarla al segundo plano y para dinamitar cualquier señal de renovación tan vital para un gobierno que apenas lleva 140 días de vida. Kirchner lo hizo: Cristina está pasando por su momento de mayor debilidad política. Esto no lo discute ni el más fanático kirchnerista. Y va por más: tras haber convertido al gobierno de Cristina casi en una frágil formalidad, la empuja a dar la batalla final contra un gigante como el campo.”
“Ya no queda lugar para las sutilezas. Si Néstor no estuviera casado con Cristina, diríamos que el ex presidente resolvió en estos últimos días tomar el poder por asalto, blanquear la situación y terminar con el doble comando. El discurso del jueves en Ezeiza pareció un grito desencajado que decía: "Acá mando yo". Presuntamente se lo decía a los "golpistas" del campo pero – en realidad – se lo estaba diciendo a la madre de sus hijos.” (ref.2)
También lo hizo pocos días después en Mendoza.
“... es crucial tenerlo en claro para desbrozar el escenario de los próximos meses. También hay que subrayar que su esposa es una presidente meramente formal. CFK hoy muestra su verdadero rostro: una tilinga que exhibe un discurso repleto de sofismas y que revela, finalmente, que su bagaje intelectual no está lejos de las niñas que “bailan por un sueño”. (ref.3).
Todo ello constituye un nuevo engaño a los argentinos, por parte de este matrimonio de manipuladores y mentirosos.
Pero el papel más triste es el de la presuntamente falsa Dra. Simplemente una figura irrelevante y decorativa en la Casa Rosada. ¿Se imaginan a la Thatcher, a Bachelet o a la primera ministro de Alemania, Angela Merkel haciendo el papel de imbecil? ¿Manejadas políticamente por sus maridos? ¿Dónde está la permanente reivindicació n de Cristina de su género? En realidad la presidente con esa conducta está dejando muy mal paradas a las mujeres.
Nos da vergüenza, no por la presidente precisamente. Por la Argentina ¡Otro papelón insólito que trasciende nuestras fronteras y del que toma conocimiento el mundo entero!.
27-Abr-08
ALFREDO RAÚL WEINSTABL
alfredo@weinstabl. com.ar
NOTAS:
(1) La Mañana de Córdoba - 27-04-08 - Opinión
http://www.lmcordob a.com.ar/ 2008/04/27/ nota165317. html
(2) El Síndrome Hubris - Alfredo Leuco - 26-04-2008. |
(3) Urgente 24.com - Los K y el conflicto agropecuario: Un matrimonio rumbo al horno
por Severo I. Turro
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