sábado, 14 de marzo de 2009

LA MECHA ENCENDIDA


LA MECHA ESTA ENCENDIDA ¿SERÁ LENTA O RÁPIDA?

Lic. Jorge Pedro Mones Ruiz

El conflicto del campo tiende a agravarse. Los principios sustentados y argumentados por una de las partes, el gobierno, son irreconciliables con los requerimientos del Campo y con lo que este sector de la vida nacional representa: el tema de las retenciones (problema de “caja rosada”) y el odio ideológico falaz y visceral hacia una “oligarquía vacuna” inexistente. Nuestros compatriotas rurales, reclamando lo justo, sacaron lo mejor de los argentinos: la defensa de los valores más importantes y trascendentes sobre los que se cimentó la República: la Bandera Nacional, el Himno Patrio, las imágenes sagradas, el federalismo. Despertaron la conciencia dormida de gran parte de la ciudadanía. Y eso es intolerable para este “matrimonio monárquico”. El complejo, el resentimiento y la venganza los llevó incluso a cometer temerariamente el sacrilegio cívico de sacarle los Granaderos al Padre de la Patria en su homenaje en Yapeyú.

Ya está en marcha una convocatoria multitudinaria para el 18 de marzo a las 18 horas en Plaza de Mayo por el tema de la Seguridad. Quizá entonces el Ministro Fernández y su jefa, adviertan que la sociedad argentina no se moviliza por una “sensación de inseguridad”; los argentinos se convocan porque están hartos del palabrerío y las mentiras a las que nos tienen acostumbrados.

Estamos cansados de ser víctimas de la violencia desatada por una delincuencia apañada por un sistema corrupto e instituciones ineficientes. Estamos conmovidos por ver caer a heroicos policías (Capitán Garrido y otros). Lloramos junto a sus camaradas, cuyas lágrimas pintan sus caras de bronca e impotencia. Nos sentimos indefensos ante una justicia, en parte cómplice del deterioro institucional, condicionada por un consejo de la magistratura que elige jueces a medida de los delincuentes de guantes blancos que jamás son removidos de sus cargos públicos.

Reveses electorales, una presidente que solo le falta vender peines en los colectivos, diáspora de ex seguidores del “señor feudal patagónico”, denuncias de personas vinculadas al “frívolo” ambiente de la farándula, que hoy sin miedo y con una indignación “caliente” y lógica, ponen al descubierto que la inseguridad no es una sensación: es el reclamo justo para que este gobierno comience de una vez por todas a preocuparse por el primer derecho humano, la vida de los ciudadanos.

Crisis en los hospitales públicos, en la educación, desocupación e indigencia creciente. ¿Hacia dónde vamos?. ¿Cómo termina esta caída?. Tendremos enfrente a un Nerón o a un Nixon. La opción puede ser el fuego de Roma (espero equivocarme) o el juicio político que marca la Constitución. El 2011 está muy lejos ... y la mecha está encendida. Lenta o rápida estamos a tiempo de apagarla.

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