PLAN B

EL ADELANTAMIENTO DE LAS ELECCIONES PROVINCIALES, UN NUEVA HIPÓTESIS OFICIALISTA

Kirchner, gobernadores e intendentes tras un plan B


Por Guillermo Cherashny para el Informador Público

Las últimas encuestas de Management & Fit y Poliarquía -empresas que acertaron los resultados del 28-j del 2009- coinciden en que el matrimonio presidencial contaría hoy con entre el 15 y el 20% de intención de voto. Pero también señalan que hay un 50% que no se decide a quién va a votar y un 70% que se siente alejado o muy alejado del gobierno. Con este telón de fondo de los números, los gobernadores e intendentes están pensando en un plan B, porque advierten que la intención de voto de los Kirchner no les alcanza para mantener sus territorios. Por eso intentan, tibiamente, tomar distancia de la suerte de Néstor y Cristina, pero no abandonan ese espacio por temor a las represalias de aquél, del que saben que no tiene ningún escrúpulo para hacer arder todo el país con ellos incluidos.

Por eso esperan tres fechas claves, como son fin de año, marzo y junio del 2010. En alguna de estas tres instancias, encuestas en mano, el matrimonio decidirá quién se presenta y si se presentan. Recién entonces habrá espacio para el plan b, teniendo en claro que los Kirchner nunca jugaron para nadie salvo para ellos mismos. Pero si no les da para continuar, recurrirán a una alternativa que pueda llegar a brindarles impunidad.



Nueva variante con el adelantamiento

La mayoría de los gobernadores se inclinan por separar la elección provincial de la presidencial, salvo en la Provincia de Buenos Aires. Esta posibilidad de Daniel Scioli fue lanzada por los grandes medios como una especie de as en la manga. La realidad es que la nueva ley de primarias bonaerense obliga a que las mismas sean simultáneas con las nacionales.

El que pensaría en desdoblar sería el propio Kirchner. En Olivos estarían estudiando anticipar las elecciones bonaerenses con la idea de lanzar para la gobernación la fórmula Kirchner-Scioli. La gobernación se gana por un voto más. Después, se lanzaría el operativo clamor Kirchner presidente, quedando Scioli como vicegobernador. En cambio, si las perspectivas son perder la elección, Kirchner no se movería del sillón de Dardo Rocha, quedando el ex motonauta como vice.

En el mismo sentido funcionaría en distintas provincias la desvinculación de las elecciones distritales de las presidenciales. Acá se anota el gobernador de Salta, Juan Manuel Urtubey, quien piensa en reelegirse y luego lanzarse a la presidencia de la mano de Alberto Fernández, ex jefe gabinete, garantizándole impunidad a los Kirchner pero desplazando a Scioli. Pero en el conurbano bonaerense en verdad no existe y le costaría mucho juntar votos.

Mientras tanto, Scioli no piensa mi remotamente en romper con Kirchner, salvo que éste y su esposa deserten de sus candidaturas. Recién entonces daría el salto hacia arriba.

El Peronismo Federal también está esperando esos plazos para ver quiénes se presentan a su interna o si Carlos Reutemann opta por lanzar su propio operativo clamor como un freno a la posibilidad de Scioli. Todos, cada uno desde su ángulo, buscan su plan B.