jueves, 23 de septiembre de 2010

TODO CRUJE............



Todo cruje y se tambalea

Sin embargo, más allá de las diferencias de todo tipo, podría formalizarse una estructura representativa que tienda a la unidad sobre bases mínimas pero posibles. Será lo inverso a la estrategia confrontativa que profundizará el kirchnerismo. El Peronismo Federal se convertirá en el Frente Unión Pro. Por el grave deterioro de la salud de Néstor, Cristina sería candidata con Gioja como postulante a la vicepresidencia.


Por Carlos Manuel Acuña para el Informador Público

Ayer, en un alto de la reunión sobre cuestiones educativas que presidía en la Casa Rosada, una acongojada Cristina Fernández hizo un alto para hablar breve y reservadamente con el gobernador de San Juan, José Luis Gioja, su socio y amigo. Con pocas palabras, le deslizó que debía prepararse para intervenir en la puja electoral del Justicialismo “para ser mi candidato a vicepresidente”. Gioja, con escaso asombro pues a igual que los más cercanos al matrimonio gobernante estaba al tanto de la situación, recibió oficialmente la novedad: “Néstor está muy mal y nos jugaremos con mi postulación diga lo que se diga”. Serio, el gobernador asintió y se mostró dispuesto a avanzar en la lucha política con la seguridad de que jugaría en la fila más adelantada. Así, pudo confirmar que Néstor no está en condiciones para ser candidato, que es cierto que su salud está muy comprometida y sin entrar en detalles, se impuso de que los números demostrarían que la actual presidente de la República confía en que podrá controlar la complejidad del momento y se apresta a intervenir en este proceso sin contar con un respaldo firme de su marido para conducir el difícil trance que vive el kirchnerismo.

Después todo continuó en medio de sonrisas. En el Hotel Regence se desarrollaba el Congreso Conectar Igualdad con la presencia de los directores de los ministerios de Educación de las provincias, para organizar una entrega masiva de computadoras portátiles para educandos, preparadas para consultar exclusivamente programas oficiales, lo que contribuyó a poner de manifiesto que el oficialismo hará lo imposible por mantenerse en el poder en términos cada vez menos sutiles. Lo que no se pudo hacer en los años setenta con la penetración ideológica en todos los niveles de la educación, ahora se lo hace desde el poder administrativo; las cartas están echadas y los acontecimientos se desarrollarán bajo este signo. Así, la decisión de no aceptar -al menos hasta ahora- la extradición del extremista Galvarino Apablaza Guerra, asesino del senador chileno Jaime Guzmán y secuestrador del hijo del propietario y director del diario El Mercurio, Sr. Edwards, no respondió a un impulso incontenible sino a una meditada decisión que puede sintetizarse en que para los amigos todo y para los enemigos cárcel y persecución. Así, los calabozos se abren para militares, hombres de las fuerzas de seguridad, policías y civiles que actuaron o se identificaron en el enfrentamiento a los setentistas armados. Pero hay algo más: si se hubiera optado por la extradición, se plantearía la incongruencia de que los responsables de muertes y otros delitos cometidos por las bandas argentinas, aquí no son enjuiciados, entonces... ¿por qué unos sí y otros no...? De esta manera, Apablaza Guerra, con años de refugiado más o menos secreto en el País, podrá continuar con el goce de su libertad y su mujer podrá mantener con tranquilidad su puesto de colaboradora de Cristina Fernández en la Casa de Gobierno. Otro dato cargado de elocuencia. Algo parecido puede decirse respecto del gobernador de Santa Cruz, Daniel Peralta, sublevado contra la Corte Suprema de Justicia por los motivos que son públicamente conocidos. Romper el equilibrio de los Poderes del Estado forma parte del estilo elegido para mantener la iniciativa política, sobre todo cuando arrecian las dificultades y los problemas complican cada vez más el tablero estratégico.

Esto es lo que le sucede al Kirchnerismo. Néstor se enferma pero no se cuida, Cristina toma la posta y sigue adelante, Moyano no descansa con sus cortes y piquetes, lo enfrentará a un Daniel Scioli fortalecido después del reto público de Néstor y la derrota sufrida con el peligroso tema de Papel Prensa será transformada en un renovado impulso de acuerdo con la costumbre de doblar las apuestas. Es probable que aunque sea por unos días, se disponga detener y procesar a Héctor Magneto y Bartolomé Mitre sin tomar en cuenta la repercusión internacional que provocaría la medida si es que se concreta. Simultáneamente se profundizará la confrontación con la Corte Suprema por las causas que están en danza u otras que se plantearían en el futuro y se acelerará una campaña mediática con diversos destinatarios. Obviamente, Eduardo Alberto Duhalde será un blanco apetecido; Mauricio Macri, que parece haber salido airoso de la organizada movilización estudiantil que tiende a agotarse - sólo intervino el tres por ciento de los alumnos llevados de la mano por los adultos trotskistas del Partido Obrero contratado especialmente - podrá centralizar su esfuerzo para enfrentar el manoseado asunto del espionaje telefónico, en tanto se mantendrán activos otros frentes abiertos después del asesoramiento de los ya conocidos Ernesto Laclau y Chantal Muffet, que consideran que la confrontación permanente contribuye a crear la sensación pública de que existe una fuerza decidida a llevar adelante un proyecto de gobierno cuya esencia es sólo eso.

Como las cosas están cambiando (por así decirlo) la idea contestataria se fortalece junto con las preocupaciones. Una de ellas que hay que tener muy en cuenta, es el enfriamiento político demostrado por el procurador “Bebe” Righi quien para sorpresa de todos, hizo recomendaciones a la Corte que afectan directamente a los K. Según parece, tanto la Corte como el “Bebe” mantendrán esta posición y aparecerán más jueces deseosos de despegarse de los Kirchner, tal como lo hizo Julio Strassera, ahora denostado desde las filas oficiales.

Todo parece indicar que en la medida que se hace más evidente el debilitamiento de los K. -con o sin el avance del deterioro de Néstor- el escenario se hará cada vez más difícil. El Peronismo Federal está preparándose para presentarse en el escenario electoral como Unión Federal, una alianza compuesta por no menos de tres partidos nacionales.

Por su parte, los intendentes de las distintas zonas del Gran Buenos Aires han establecido vasos comunicantes entre ellos más allá de la amistad e intereses que une a los distintos grupos. Duhalde saldrá de Lomas de Zamora a recorrer el país. Se reunirá con gobernadores todavía kirchneristas y tomará contacto activo con otros sectores de la sociedad. Su mensaje hablará de la necesidad de superar el pasado y los divisionismos, de apuntalar la producción y la seguridad jurídica y la otra que tiene en ascuas a la población. En pocas palabras, el ajedrecista movilizará fichas que forman parte de un reclamo extendido y podemos anticipar que muy probablemente surja dentro de muy poco tiempo una organización multipartidaria, multisectorial y pluralista que unirá a sectores representativos en torno de objetivos mínimos pero concretos que superarán diferencias que hoy todavía están vigentes. Más aún, se sabe que existen conversaciones tendientes a formalizar todo esto que dejamos dicho y que podría significar un paso muy serio para intentar revertir los desencuentros. Sobre todo, para reemplazar de una vez por todas, lo que cruje y se tambalea.

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