Por Ernesto Poblet
El 28 de octubre de 2007 quedará marcado en la historia como el día misterioso de un resultado electoral a la medida perfecta del matrimonio que lo diseñó. Ambos cónyuges aparecieron por milagro un día del año 2003 para ocupar la residencia de Olivos y la Casa Rosada. Una aureola de suerte acompañó al extraño político sureño, más allá de sus atolondradas e insulsas cabriolas con el bastón de mando que conmiseró a las pantallas televisivas del mundo.
Después de una paciente lucha de años de sus antecesores en el sillón gubernamental de Santa Cruz se encontró el Dr. Kirchner beneficiario del cobro todo junto de regalías, años acumulados por la producción de petróleo y gas. No muchas veces los gobernantes suelen recibir regalos traídos casi del cielo sin hacer el menor esfuerzo e iniciativa. Así como llegaron los 710 millones de dólares, presuroso el hombre los hizo desaparecer en ignotos paraísos fiscales dejando traslucir algunas curiosas versiones, entre ellas, la más retorcida, daba cuenta de un depósito en la Reserva Federal de los Estados Unidos.
Nadie se atrevería a recordarle la imposibilidad de efectuar esas operaciones en un órgano tan alejado de los meros depósitos bancarios. Ahí empezaba a notarse cierto tufillo de falsedad. De cualquier modo siguen pasando los años, las sumas parecen crecer pero nadie puede acercarse a vislumbrar esa asombrosa realidad que nunca deviene en verdad transparente o en juicio político como correspondería en cualquier país serio.
La suerte o su sinónima la fortuna sigue acompañando al audaz mandatario y su esposa.
Miles de agricultores en el año 1996 se arriesgaron en operaciones perseguidas y boicoteadas por sectores fundamentalistas de la ecología. Creyentes lúcidos en la tecnología de punta de los seres humanos se lanzaron a la siembra directa de la soja transgénica y el maíz Bt.
El esfuerzo dio resultados óptimos. Mientras se favorecía con los ingresos portentosos el presidente gruñón acusaba de “avaros, oligarcas” y otras lindezas a la gente del campo. Entraron al país exactamente en los años de la gestión Kirchner las cantidades increíbles que sumaron 20.000 millones de dólares por los oleaginosos transgénicos exportados al mundo.
Este acontecimiento más la China y la India que añaden tres mil millones de habitantes -consumidores alimentarios de nuestros productos- proporcionaron a la Argentina un extraño bienestar al cual no estaba acostumbrado el país desde largas décadas atrás. Atesoró esos resultados como propio mérito el perspicaz y oportunísimo gobernante proveniente de la lejana Patagonia.
LA ELECCIÓN DEL 28 DE OCTUBRE
Me lo imagino al connubio “ganador” sentaditos en una mesa acompañados de sus dos o tres colaboradores de extrema confianza. Impartirían instrucciones: “…hay que dejarlos ganar la Capital, Córdoba, Rosario y Mar del Plata donde no controlamos demasiado…Nosotros nos reservamos la garantía del Conurbano con los muchachos que maneja De Vido a través de las obras públicas y subsidios y la cándida candidatura del manquito.
Los intendentes y el punteraje que nos legó Duhalde responden con la más cálida y desinteresada adhesión. Lo que no podemos darnos el lujo de perder es nuestra querida provincia, ojo porque allí está la causa judicial de los millones de Santa Cruz y eso quema demasiado. Imagínense los estragos que nos harían padecer si no gobiernan allí nuestros compañeros. Mientras la denuncia permanezca en el despacho del yerno de mi hermana Alicia no hay problemas, es un hábil juez. Por favor no se descuiden, es demasiado delicado…”
El procedimiento ha sido meticuloso, estudiado y ejecutado tras el aval del riesgo cero: “Al envío de los miles de telegramas necesarios para las autoridades de mesas se hace necesario el rechazo de quince mil para arriba.
Eso nos permitirá una confusión en el arribo de los votantes, van a llegar sistemáticamente tarde por el temor de ser capturados en los trabajos del comicio, se producirán aglomeraciones, quedará afuera un porcentaje alto de gente, desde las primeras horas a nuestros fiscales, o los compañeros que figuren en los padrones -o los inscriptos al efecto- al ir a votar se los instruirá para desordenar y llevarse los pacos de boletas de la oposición.
Eso producirá una desorientación, muchos protestarán pero serán los menos, cualquier desbande o los mismos reclamos irán directamente a los jueces amigos, además ya saben, siempre la tenemos firme a Romilda que sabe atajar muy bien los peores penales…, por favor, no se olviden de aceptar la propuesta de Luís, ésa de contratar paraguayitos y bolitas -con DNIs. ad hoc- para apoyar el saqueo de boletas opositoras de los cuartos oscuros”
Nunca se vio semejante movilización. Desaparecían los fajos de boletas en Capital y Conurbano. La gente sorprendida, los fiscales y autoridades vigilaban los cuartos oscuros constantemente lo cual contribuyó a perder y extender el tiempo. Las incomodidades y aglomeraciones perturbaron el acto comicial. Al no encontrar sus listas la mayoría de los afectados eran orientados a votar por otra ¡insólito…! la gente comentaba indignada y muchos no pudieron sufragar o debieron cambiar su voto. Lo curioso –comentaban- sólo los partidos de oposición padecían las boletas faltantes.
Fue la jornada comicial más irregular y desprolija que se tenga conocimiento y el ministro del Interior se apresuraba a calificarla como la mejor de la historia. Desde luego, todos tienen derecho a recurrir a la Justicia. Pero qué Justicia. ¿a ésta Justicia…? se interrogaban indignados pensando en la famosa jueza.
El viejovizcachismo ha pasado a ser norma y costumbre entre los argentinos. El nuevo invento ahora es la corruptela de las listas colectoras. Se inventan partidejos con un sello cualunque. Adhieren al fantasmal Frente para la Victoria desde afuera. Traccionan así votos perdidos de otros sectores y logran colocar algún legislador y aumentar puntos de la candidata digital. Dinero no falta cuando el Estado y su administración solventan cualquier aventura. La revelación protagónica ha sido el titular de Ansés, el entusiasta Sergio Massa decidido a ganar la intendencia del Tigre a cualquier precio. Pronto conoceremos más información asombrosa.
El actual gobierno se había comprometido a instalar el voto electrónico como medida práctica tendiente a atenuar el fenómeno del crecimiento demográfico. Parece haberlo encontrado no conveniente a sus designios electoralistas. No se encuentra más esa solución en las agendas oficiales mientras en Brasil y Paraguay ya es una realidad exitosa.
La manipulación escandalosa del acto comicial del 28 de octubre ha colmado de indignación a nuestra comunidad. Repetían: “faltan boletas de los partidos de oposición” “Qué casualidad… nunca faltan las del frente para la Victoria…” “Hay demasiada gente, se aglomeran, está todo mal…” El clamor se había generalizado. Mientras Aníbal Fernández, feliz, desde el Correo comunicaba al mundo: “Fue el acto eleccionario más cristalino que se haya visto en la historia… No hubo denuncias de fraude…”
Bien decía Bartolomé Mitre: “Cuando el pueblo se equivoca, todo el mundo se equivoca…”
Pero la peor equivocación de nuestra comunidad ha sido tolerar y no protestar acerbamente contra los descarados y evidentes atropellos sufridos que han determinado un falso triunfo del oficialismo a través de maniobras tenebrosamente fraudulentas.
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