viernes, 18 de abril de 2008

LA CAIDA DEL CIRCO

La caida del circo politico argentino

Están quemando los campos de la provincia de Bs.As, y no cabe titubeos que estas misteriosas combustiones de pastizales está suscitada con el propósito de restringir la alimentación del ganado y atemorizar a los productores, la respuesta exacta es manejar a estos criminales como simple cuatreros y extirparlos de raíz, esto cambiaria el método de presumir del gobierno, al sentir que sus matones se van esfumando ante la reacción colectiva nacional. Es inexorable que en esta vida hay que tomar medidas drásticas para solventar contrariedades y soluciones, lo deplorable es que el pueblo argentino se haya dejado barajar por ese grupo de montoneros-patoteros del '70, que criminalizando a los militares, se fueron apoderando de la nación con esa fábula del Nunca Mas, y una sistemática ablución de la verdad sobre las huestes sediciosas, que hoy cuentan con presentaciones a sus desaparecidos, pañuelos blancos de madres solventadas financieramente por el gobierno KK, para eventualmente terminar todo esta farsa en una regeneración de guerra civil, al avisparse el pueblo atropellado reiteradamente por este gobierno totalitario.

Es inexorable que una repetición de la historia se aproxima en esta Argentina de hoy, que la dinastía KK controla, por medio de caudillos y Montoneros disfrazados de políticos, pero en esta oportunidad van a tener que lidiar los "blancos" con estandartes de azul y blanco contra los negros de D'Elia, de Moyano y Quebracho, con sus banderas rojo y negro, en tanto los militares observan la contienda desde las tarimas.

Lo asimismo patético, es observar la inanición de la iglesia católica; que en su momento genero tanta pelotera contra Peron, que apoyo las acciones de los militares durante la represión montonera y hoy, son simples y mansos corderos patagónicos. En tanto el resto del mundo solo se inquieta y pone presiones para que paguen los bonos y la deuda al Club de Paris, ya vislumbrando la caída inevitable de este circo político argentino.

Saludos,

BetoMvit

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