PRENSA CONTROLADA

jueves 26 de febrero de 2009
¿La prensa controlada?

Un año electoral en que se limitará la comunicación imparcial de los hechos y de las propuestas políticas

Por Juana Marco

En este año electoral los medios de comunicación parecen ser el coto de caza de las autoridades, por considerar que a través de ellos se puede ganar una elección.

Un experto empresario periodístico, es quien parece haber sido favorecido como responsable del operativo invasivo de los medios hasta obtener el triunfo electoral, con lo cual, el nivel de control y de influencia, no contribuirá a mantener un panorama objetivo o imparcial de la realidad.

Por otro lado, cualquier gesto o convocatoria de la oposición no logrará la difusión necesaria para hacerla pública, evitando su propósito de obtener el respaldo necesario a sus propuestas.

Un año, en que las cuestiones que se desarrollen que no estén en sintonía con los planes electorales oficiales, se desviarán a otros temas de menor relevancia, como podría ser el deporte, encuestas sobre cuestiones cotidianas, referencias del ámbito artístico, etc.…

Serán exiguas las oportunidades en que la oposición podrá expresar sus disidencias o sus opiniones críticas respecto de algunas medidas.

Este panorama sombrío y de incomunicación ya ha comenzado. Por ejemplo: en estos días ha habido una manifestación en la calle céntrica de la Av. Florida en Capital, que expresaba a través de pancartas y con la presencia de la gente los temas que no satisfacen los requerimientos de la población y que provocan disgusto. Sin embrago, han sido unos pocos los que han tenido la oportunidad de enterarse, como también, respecto de las marchas del sector del campo que se van programando, etc.…

Asimismo, las deserciones de dirigentes de la línea interna del PJ oficial no cuentan con la debida información. A pesar de que los movimientos dentro de las filas del PJ continuarán no se les dará la posibilidad de difundir debidamente los motivos.

La determinación de promover este escenario se debe a que a pesar de ser una elección que no es tan relevante desde lo gubernamental, si lo es desde lo político,

ya que, a pesar de que solo se trata de la nueva composición de la mitad de ambas Cámaras y que las autoridades podrían seguir gobernando por decreto, (habito muy frecuente en la política nacional, especialmente en el transcurso de la actual gestión). Sin embargo, el resultado final definirá la fuerza y el respaldo con el que cuenta la actual administración.

Quedaría entonces definido el equilibrio político dentro de las reglas de la democracia. Es decir que, la oposición podrá exigir al oficialismo un cambio de rumbo político y económico, por contar con el apoyo mayoritario de la población.

Si se confirmara esta posibilidad, la debilidad de la imposición unilateral en las determinaciones y los perjuicios que ocasiona el no aceptar las medidas impuestas, comenzaría a debilitarse esa forma de gobernar.

Obligando a realizar ciertas modificaciones en las conductas arbitrarias o negativas, al no contar con el respaldo necesario y debido a la vigorización de una oposición cada vez mas afirmada en un concepto común: “el descontento por el actual rumbo que está conduciendo al país hacia una pendiente cada vez mas profunda”

Si se considera el presente panorama, se lograría tomar conciencia de una realidad que: por un lado afectará las líneas de comunicación entre la población, pero por otro, si se logra una integración consolidada de las diferentes fuerzas opositoras, podría ser la oportunidad en que el voto de cada ciudadano definiera un cambio de rumbo respetando la democracia y los periodos constitucionales.

Esta puede ser la ocasión para poder demostrar que la convicción de un pueblo que busca el bienestar y el progreso, tiene mucho más fuerza que todos los medios de comunicación. Destacando que, la convicción y la necesidad pueden también expresar su voluntad en forma genuina y voluntaria desde cualquier rincón del territorio, aun prescindiendo de la comunicación constante de los medios de mayor alcance.

Por lo tanto, frente a las próximas elecciones solo cabe tomar conciencia de las limitaciones y no dejar por ello de respaldar y participar, apoyando a quienes verdaderamente tengan la voluntad de quebrar, a través del Congreso, las medidas que no permiten la evolución del proceso productivo y las que detienen el normal flujo de las exportaciones.

Finalmente, cabe tener presente que, tanto la comunidad, como la dirigencia política deberán ser responsables de sus actos y de su presencia activa con su voto, desde el lugar que les corresponda, ya que, del conjunto de la sociedad dependerá el nuevo rumbo político, económico y social hasta las próximas elecciones presidenciales.

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