Transcurridos los primeros cien días desde la asunción, el 10 de diciembre de 2007, de las autoridades electas en el orden municipal, provincial y nacional; visto así parece que viviéramos el federalismo más auténtico.
A esta altura nos encontramos con gobernadores é intendentes tan sumisos al poder central que no se atreven siquiera a decir lo que ellos mismos piensan; conozco a muchos de los funcionarios locales desde sus abuelos extranjeros y arrendatarios o propietarios de dos o trescientas hectáreas quienes mostraban bajo sus uñas el cariño que a esa tierra le tenían, y no puedo creer que estos chicos tengan tanta “vocación de servicio” que no se animan ni a caminar las calles como hacían en la campaña electoral, y mucho menos expresarse.
La exacción que sufren los productores a través de retenciones confiscatorias e impuestos varios que van a un poder verticalista a ultranza, que lo aprovecha para someter a dirigentes sin personalidad que solo aspiran a mantener el puestito.
Entiendo que el gobierno fue elegido democráticamente y que su parte ejecutiva tiene mandato por cuatro años y ello debe cumplirse. Y también soy consciente que ante los atropellos que se viven, es correcto emplear los mismos medios que el oficialismo viene empleando desde la creación de ese movimiento, para informarles cuando se equivocan. Coincido con el contenido de la carta abierta publicada por la señora Franco el sábado 29 de marzo en El Popular; y a través del comentario de la señora Carmen Acevedo Díaz en La Nación, me entero que la señora presidente usa para gastos de vestimenta y afeites varios algo mas de tres mil pesos diarios; o sea, la elegancia de la señora cuesta por día tanto como el ingreso mensual de cinco jubilados. Coincido con la señora presidente cuando dice que no es necesario mostrarse como pobre, pero cuando habla de la “señora paqueta de barrio norte” omite estos detalles y también el costo de sus medios de transporte. Pasando por el Tren Bala que quizá traslade a los cartoneros de Rosario hasta la Capital a bajo costo.
La señora presidente se ufana al decir que la mayor recaudación la obtiene del IVA. Que es el impuesto mas deplorable, ya que es pagado por los mas débiles económicamente, por ejemplo a un jubilado que cobra seiscientos pesos, compra por cuatrocientos setenta y cuatro, porque pagó en concepto de IVA ciento veintiséis pesos, que van a las arcas y cuyo destino es muy confuso. Ahora se le han aumentado los gastos, ya que la bolsa “Probienestar” a sufrido la poda de queso cremoso, dulce de membrillo, conserva de pescado, flan, gelatina, caldo en cubos, etc. Uno se había acostumbrado a estos lujos, vió?
Los pequeños productores que quedaron después de la convertibilidad del gobierno peronista de los noventa; encabezado por el doctor Menem, innombrable hoy para quienes lo votaron tres veces para presidente; se encuentran nuevamente con un socio en las ganancias que quiere, y si se le permite lo logra, asignarle un ingreso limitado por su inversión y trabajo realizado, sin respetar el derecho a la propiedad, sin tener en cuenta aquello que escuchábamos en los años cuarenta “la tierra es para el hombre que la trabaja”, cosa que nunca se cumplió, ya que la única reforma agraria cierta se hizo en 1930, y muchos de los pequeños productores de hoy, son herederos de los beneficiarios de aquella época, que compraron sus parcelas con crédito del Banco de la Nación a treinta años.
Las oportunidades siempre se presentan y esta es buena para comenzar a pensar hacia dónde orientaremos nuestro voto legislativo, que es el mas efectivo llamado de atención a un gobierno en medio se su lapso, en 2009.
Señora y señores gobernantes. .. el campo es otra cosa ¡quiere mantener su dignidad!
Juan Horacio Varetta DNI 5372072 Ituzaingó 2555 Cel 0228415551364 Olavarría
martes, 1 de abril de 2008
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