AYER FUE 25 DE MAYO ¿ O 17 DE OCTUBRE ?

Ayer fue 25 de Mayo y hoy no parece ser 26. Horas que parecen décadas.
A 198 años de la revolución de Buenos Aires el conflicto es casi el mismo: Puerto contra Virreynato, Casa Rosada contra País Federal.
La singularidad es que ayer fue un día peronista.

Por Juan Carlos Sánchez


Hoy 26 el gobierno cortó el diálogo con la sociedad y exige su acatamiento fundándose en el 45% que dice haber obtenido en las últimas elecciones de Octubre 2007. Ni fue ese porcentaje (considerado sobre el padrón) ni existe hoy así hubiese sido. La PresidentA está cerca -por debajo- del 20% de aceptación en las mediciones. Y que quiere que le diga... Esta historia me suena conocida. Casi igual al ’76 con una PresidentE legitimada con el 60% de los votos y la confianza de su esposo muerto.
Para colmo de males hoy murió Ítalo Argentino Luder con lo que no hay reemplazante temporario posible. ¿Hay alguien en el peronismo capaz de un interinato por un tiempo de enfriamiento social hasta que se reponga la PresidentA de los actos de ayer? Los tiempos modernos inclinan la balanza hacia un reemplazo definitivo, le pasó a De la Rúa, es la dinámica de la Argentina actual. El gobierno parece ignorarlo y rompe la cuerda.

El Ministro Fernández (¿Cuál de ellos será? Hay tantos...) sale hoy a decir que por lo de ayer en Rosario (los 300.000 y los discursos) no habrá reunión con el campo. Eso se discutió anoche en Olivos entre tres, dos Fernández y un Kirchner o dos Kirchner y dos Fernández, 2+ 2 = 3, esas son las matemáticas políticas argentinas.
Más dureza, de rodillas campesinos. Error de suma.
No es el campo, es el país federal que suena diferente. Ayer se vio. En Salta 40.000 personas, admitamos algunas más si quiere, dupliquemos la cifra, llevadas, arreadas, desinteresadas al punto de no dejar hablar a la PresidentA con bombos y gritos. En Rosario, contrapartida, 300.000. Pongamos 200.000 como dicen que dice la Policía. Más del doble y fueron solos, no lo pagamos entre todos los ciudadanos como al mamarracho sin el Chaqueño Palavecino en la patria chica del Gral. Güemes.
Usted, ¿con qué acto se queda? ¿Con qué discurso?
Los 15 minutos de Cristina fueron los más caros de la historia institucional del país y nadie lo toma en serio. Bah, algunos sí, los menos. Y entre ellos el gobierno que tampoco cree pero dice que cree y cree que creerán. Son los menos, está probado.
El encuentro de Rosario le salió gratis al país. Pagaron cada uno de su bolsillo, sean los particulares o las instituciones, nada del presupuesto de todos nacional, provincial o municipal. Pero es el más caro para todos. ¿Sabe por qué? Porque nos lleva a la ruina.
(Salvo que...)

Nos lleva a la ruina porque no habrá trigo ni vacas ni país del interior pasado mañana.
Nos lleva a la ruina porque no se exportará granos.
Nos lleva a la ruina porque subirán los precios en las góndolas y habrá inflación.
Nos lleva a la ruina porque crecerá el clientelismo, la pobreza y la exclusión.
Nos lleva a la ruina porque habrá ingobernabilidad.
Nos lleva a la ruina porque retrocederemos ética y políticamente.
Nos lleva a la ruina porque se profundizarán las divisiones entre hermanos.
Nos lleva a la ruina porque correrá sangre.
Salvo que...

Los Kirchner se hagan cargo del estropicio y dejen de culpar al campo, al interior y a cualquiera que no sean ellos mismos de este desaguisado.
Que cambien o que los cambien. El quebranto está porque los pingüinos no saben volar.
Ciertamente el problema son los Kirchner, en esto coinciden demasiados en el país, vea las encuestas que no se publican.


El protagonismo del peronismo

Juan Carlos Fornés de visita en la redacción de este diario y sin leerme previamente coincide con mi anterior nota, me dice: “¿Y si ahora el peronismo se refugió en el campo?, ¿vos esperabas que esto saltara desde el campo?” Fornés es un peronista de la vieja guardia, escuchable. Tuve que remitirlo a “Ortodoxia y ortopraxis y el desvelo de los añorantes” ( http://www.politicaydesarrollo.com.ar/nota_completa.php?id=3443 ). Allí abordo el fenómeno.

El acto de Rosario fue comparado por los medios y los actores políticos con la visita de Eva Perón a la misma ciudad, los discursos fueron peronistas incluso con citas de Perón. Buzzi (¿se habrá peronizado como le pide Eberle Patterson desde la lejana Comodoro Rivadavia? Reconoció serlo en un programa televisivo días antes de la convocatoria rosarina), De Angeli (pese a sus raíces neo marxistas impuras) recordaron en sus discursos a los de General y los demás oradores orillaron la doctrina. Curioso pero lógico, la Argentina no puede ignorar a Perón, ni Néstor Carlos Kirchner pudo y tuvo que atrincherarse dentro del nuevo pejotismo de Puerto Madero armado a su imagen y semejanza.
Esto permite avizorar un posible acuerdo o coincidencias al menos entre actores políticos y sociales para destrabar la crisis en la que nos sumergieron los Kirchner y que hoy profundizan. Es la racionalidad versus el despecho y la intemperancia. Si hay salida será peronista y la similitud con el episodio que catapultó a De la Rúa fuera de la Rosada es que tampoco los Kirchner son peronistas, no en balde anoche mismo Carlos Menem fue consultado a fondo por Mauro Viale y nadie puede desconocer algunas particularidades de estos tiempos: Que Menem es el adversario más emblemático de los Kirchner, que derrotó a Néstor en 2003, que gobernó diez años y medio siempre poniendo la cara y adhiriendo a Perón, que el ex presidente no es mencionado exactamente con afecto por la dirigencia menos moderada del campo y que es el referente peronista más odiado por los Kirchner y el más representativo de los últimos tiempos. Pero el interregno que podrá sobrevenir seguramente no pasará por él y él lo sabe.

La tensión social en el país federal es tan grande a esta hora que dicen que dicen que la salida estará en manos de la Asamblea Legislativa quien designará a un hombre con experiencia ejecutiva, bien visto tanto por urbanos como campesinos y con nervios suficientes como para conducir el país a la velocidad necesaria y sin derrapar.
Esto siempre y cuando el kirchnerismo no mire la realidad, cosa improbable pero no imposible, y se arrepienta.

Pase lo que pase y como sea, de alguna manera se debe terminar con la crisis. El país no aguanta más crispación ni puede vivir de la mentira. Esto lo entienden las instituciones de la República y de la civilidad, la Iglesia Católica entre otras, las uniformadas y las políticas y el peronismo como fuerza mayoritaria tampoco soportará más divisiones internas. Este vuelco hacia el discurso cuasi doctrinario escuchado en estos últimos días pone marco a un nuevo acuerdo nacional que redefinirá las reglas de juego de la política para el futuro inmediato que inevitablemente deberá poner paños fríos en la comunidad y terminar definitivamente con cualquier posibilidad de que en el futuro se repitan marginalidades ideológicas selectivas que dividan el cuerpo social utilizando la manipulación de la historia y de la justicia y controlando desde el presupuesto nacional legisladores y funcionarios provinciales.

Y es muy posible que la solución a la que se deba arribar duela al menos a algunos que hoy gozan de impunidad. La taba se da vuelta en el aire, sucede por más diestro que sea el tirador. Será una nueva frustración para la democracia y la República que bien utilizada puede enseñar mucho.

Entre otras cosas no menores debemos aprender que los pingüinos no saben volar.


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