FUTURO DE TRAGEDIA

LOS KIRCHNER TIENEN RAZON



Escribo a la tarde del martes 27 de Mayo, sin conocer las últimas noticias. Esto podría solucionarlo muy fácilmente viendo la TV u oyendo la radio, pero prefiero no hacerlo para mantener este comentario en el plano de análisis en que lo sitúo. No trato de interpretar los más recientes sucesos. Trato de analizar el conflicto en profundidad.
¿Tienen razón los Kirchner, como anticipo en el título? ¿En qué? En una sola cosa: en que la posición de los representantes de las entidades agrarias se hace cada vez más política y menos gremial. Todavía repiten, de vez en cuando, que el núcleo de la cuestión en debate son las retenciones móviles pero ni ellos lo creen. Las frases que hirieron a Néstor y Cristina son, en verdad, mucho más políticas que una simple expresión de un conflicto social.

¿Y por qué? Porque esta es la REALIDAD: las circunstancias – y los mismos Kirchner – han ido politizando el conflicto hasta convertirlo en algo totalmente distinto de lo que fue en su origen. Si el gobierno hubiera pactado con los ruralistas en Marzo, todo hubiera pasado a la historia como lo que EN ESE MOMENTO ERA: un reclamo sectorial.

Al demorar injustamente la solución, chicaneando, engañando y trampeando, los Kirchner comenzaron la politización. Y siguieron esa politización al abroquelarse en su posición, ignorando la importancia que el asunto iba teniendo, ignorando que se estaba convirtiendo en el vehículo de todas las broncas y los odios que habían ido suscitando, broncas y odios que la oposición era incapaz de receptar y reflejar.

En un determinado momento quedó en claro que el problema ya no eran para nada las retenciones: EL PROBLEMA ERAN LOS KIRCHNER y su absurda manera de gobernar. Lo que quedaba cada vez más claro era que no podían resolver el en si mismo minúsculo problema económico planteado PORQUE SU INTELIGENCIA DE LO QUE SUCEDE ES NULA. O para decirlo más sencillamente PORQUE NO SABEN GOBERNAR. La “sabiduría” de Néstor, consistente en surfear, con cierta habilidad, en la ola mundial de altos precios de las materias primas, se terminó. En cuanto se plantean problemas de mayor entidad, los Kirchner NO SABEN QUE HACER.

La prueba acabada de esto es la inflación. En un excelente artículo en La Nación del domingo pasado, Roberto Frenkel dice – con toda razón – que el problema no es la inflación y ni siquiera su falsificación en el INDEC-K. El problema es, dice, que el gobierno cree en serio las cifras de sus paniaguados y se cierra así toda posibilidad de resolver un problema que niega y que se agranda día a día.

Esto nos da la estatura mental de los Kirchner. Queda así en claro que Cristina es Isabelita II y Néstor es – mutatis mutandis – su López Rega. Y si esto es así, si esto es lo que ha desnudado el conflicto con el campo, entonces el problema se ha hecho político y tienen razón los K en percibirlo – aterrorizados – así.

No es cuestión de derogar ya, retenciones. Es cuestión de que sería imprescindible que los K cambiaran radicalmente. Y eso es imposible.

Nos encontramos, pues, en un dilema sin solución aparente. Se abren meses trágicos para la Patria.

ANIBAL D’ANGELO RODRIGUEZ