LA KK AMARRADITA.....ASUSTA

Por Lucrecia Bullrich
De la Redacción de lanacion.com
lbullrich@lanacion.com.ar


El flamante triunfo de Hugo Chávez para instaurar la reelección ilimitada volvió a encender luces de alarma en torno a la política exterior del Gobierno.

Legisladores de la oposición consultados por lanacion.com advirtieron que, aunque la enmienda de la Constitución venezolana no cambiará "sustancialmente" el vínculo con la Argentina, contribuye a aislar al país del resto del mundo. Con la crisis económica como telón de fondo, ese es el efecto que, aseguran, más perjuicios podría generar.

Diputados del oficialismo, o cercanos a algunas políticas del Gobierno, en cambio, defendieron la preponderancia de Venezuela en el mapa de las relaciones exteriores de la Casa Rosada. Unos y otros destacaron, no obstante, que el triunfo del sí tiene que ver con la autodeterminación del pueblo venezolano y no es, al menos desde ese punto de vista, cuestionable.

Segundos, afuera. "La relación con Venezuela tiene que seguir existiendo. Pero el déficit en la política exterior de los Kirchner es cada vez más grave y la relación con Caracas no hace más que profundizarlo", planteó el diputado radical Pedro Azcoiti.

Para el legislador, vicepresidente de la Comisión de Relaciones Exteriores de la Cámara baja, "el error más grave del Gobierno es priorizar la relación con Chávez en detrimento de otras". En la misma línea, afirmó que la Casa Rosada debería alimentar con la misma energía los vínculos con Brasil, Chile y Uruguay.

El jefe del bloque de Pro en Diputados, Federico Pinedo, enmarcó sus críticas en el "giro" que, a su juicio, experimenta el mundo desde que Barack Obama se convirtió en presidente de los Estados Unidos. "Empezó un proceso de mayor democracia, mayor respecto a los derechos humanos y multilateralidad, y eso va a tener correlato en América latina necesariamente", diagnóstico.

Frente a este panorama, describió la instauración de la reelección ilimitada en Venezuela como "un acto de bonapartismo fachista propio de la década del 30" y concluyó: "Este tipo de decisiones ratifica que Venezuela va a contramano del mundo y que queda cada vez más aislada".

Arrastre. Enseguida, razonó que en la medida en que la Argentina "siga pegada" al país caribeño "seguirá aislándose del mundo al que necesita volver". Su conclusión fue tajante: "Que la única relación seria y profunda sea con Venezuela habla de la pobreza estructural de la política exterior de los Kirchner. El eje Río Gallegos - Caracas es el reflejo de una pobreza estructural exterior insostenible".

Beneficio en duda. Desde la Coalición Cívica, Adrián Pérez compartió la preocupación por el "aislamiento". "Espero que la reelección ilimitada no sirva para que el Gobierno potencie su estrategia de relacionarse casi exclusivamente con Chávez en desmedro de vínculos fundamentales con otros países del Mercosur y la Unión Europea", advirtió el jefe de la bancada de la CC en la Cámara de Diputados.

Para el legislador, el riesgo de que esto último ocurra "es muy alto". "Sería muy riesgoso que, en un momento en el que hay que recuperar la credibilidad en el mundo, quedemos atados a una única relación que ni siquiera trajo réditos económicos y que, por el contrario, está cargada de sospechas", ahondó en alusión al escándalo de la valija y a la polémica compra de bonos de la deuda que Chávez concretó a un interés del 15 por ciento.

Desde su lugar de integrante de la alianza electoral que la semana pasada selló con Mauricio Macri y Felipe Solá, Francisco De Narváez fustigó tanto la reelección ilimitada como la relación con Chávez.

"Lo que pasó ayer es una pésima noticia para la democracia. Utilizar el Estado para la construcción de proyectos que sólo aspiran a la permanencia en el poder es lamentable. En este caso, tiene legalidad pero no legitimidad", evaluó.

"Más que suficientes". El diputado cuestionó la posibilidad de aspirar a la presidencia de manera ininterrumpida que ayer convirtió en realidad el venezolano a través de un paralelo con la coyuntura local. "A millones de argentinos nos queda claro que dos periodos de gestión, aún dentro de una misma familia son más que suficientes", ironizó.

De Narváez no dudó de que la recién adquirida reelección ilimitada convierten a Chávez en un "factor desafiante" para la región y una "pésima" señal hacia el mundo.

Factor petróleo. A contramano de las advertencias, Eduardo Macaluse (ex ARI) defendió la relación con Venezuela y la necesidad, no sólo de mantenerla, sino también de profundizarla. Además, celebró los resultados del referéndum venezolano.

"Venezuela es el único país de América latina que integra la OPEP, tiene gran influencia allí y es un país clave para la articulación de la región", argumentó. Según el diputado, el país de Chávez, la Argentina y Brasil conforman el "triángulo" de las economías más fuertes del bloque y la buena relación entre ellos "es fundamental".

Con la misma energía, Macaluse defendió el triunfo del sí. "Es una decisión de los venezolanos y es respetable como tal. Es obvio que el ejercicio continuo del poder tiene riesgos pero, frente a la oposición venezolana, es preferible asumir esos riesgos", disparó. En esa línea, el diputado añadió que la oposición de "no trepida en acceder al poder como sea" y consideró que sus propuestas son una "invitación a volver al sistema bipartidista corrupto que existía entes en Venezuela".

Triunfo compartido. La defensa más cerrada de la cuidada relación con Caracas quedó a cargo del ultrakirchnerista Edgardo Depetri. "El triunfo de Chávez es también un triunfo de nuestra política exterior, que optó por los líderes y procesos políticos que nos alejaron de las imposiciones de Bush [George W., ex presidente de EE.UU.] y que apuestan, en cambio, al desarrollo de los vínculos con el Mercosur y con el resto de América latina. Es un logro para un modelo nuevo de relaciones internacionales que está apareciendo en el mundo", opinó.

El legislador recordó Cristina Kirchner hizo su última visita a Caracas en enero último, en plena campaña por la reelección ilimitada. "Cristina fue [a Venezuela] plenamente consciente de lo que hacía y de la necesidad de seguir sosteniendo un acuerdo regional con Chávez, [el presidente de Bolivia, Evo] Morales, Lula y [el ecuatoriano Rafael] Correa", afirmó. Según el legislador, esa "alianza estratégica" permite "seguir desarrollando las economías regionales de manera integrada y defendiendo posturas en común en los foros internacionales".

En línea con Macaluse, Depetri destacó el veredicto de las urnas. "Cada pueblo decide su forma de organización y acá estamos ante una mayoría importante que plantea no sólo la reelección sino que apuntala el nuevo modelo de sociedad que impone la revolución bolivariana", destacó. Enseguida, añadió que la reelección ilimitada "es un instrumento" y, como tal, "no es ni malo ni bueno en sí mismo".

Contra los críticos. Por otra parte, el ultrakirchnerista apuntó contra quienes critican el vínculo con Chávez. "Los que nos cuestionan, ideologizan un tema relativo a la defensa de nuestros intereses y tienen una mirada anacrónica de las relaciones internacionales", retrucó.

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