domingo, 8 de febrero de 2009

PARÁLISIS JUDICIAL PARA CORRUPTOS



PARÁLISIS EN CAUSAS DE FUNCIONARIOS POR CASOS DE CORRUPCIÓN
GRAVE DENUNCIA DEL VICEPRESIDENTE DEL CONSEJO DE LA MAGISTRATURA


El titular de la bancada radical del Senado, Ernesto Sanz, advirtió hoy que las causas judiciales de funcionarios por casos de corrupción "tienen la misma matriz de lentitud o de paralización" que las de derechos humanos, denunciadas por el juez de la Corte Suprema Eugenio Zaffaroni.
El vicepresidente del Consejo de la Magistratura sumó así críticas a la actuación de algunos juzgados e indicó que a las causas por desapariciones "se debe adicionar la situación existente en las que se investiga a funcionarios públicos por hechos irregulares".
"Tienen la misma matriz de lentitud o de paralización que las denunciadas por Zaffaroni", afirmó el senador mendocino, al tiempo que denunció que "en algunos juzgados" es muy "fácil" advertir el "perverso círculo de impunidad". Sanz se sumó así a la polémica generada por uno de los jueces de la Corte Suprema respecto a la actitud "negligente o dolosa" de algunos magistrados respecto a las causas de derechos humanos.
Señaló mediante un comunicado que lo más grave de esta situación "es el hecho de que algunos jueces encuentran en los propios códigos de procedimiento las excusas legales para demorar, cajonear o archivar las causas por corrupción" Al tiempo que destacó que de esa manera "generan su propia cobertura frente a una acusación por mal desempeño y cierran el circulo perverso de impunidad que es fácil de advertir en algunos juzgados".
Desde la localidad mendocina de San Rafael, Sanz agregó que "el sistema judicial actual muestra de manera indignante cómo hay funcionarios actuales denunciados en infinidad de causas y juzgados, sin resultado alguno".
"Mas aún, algunos de ellos no conocen siquiera el edificio de los Tribunales, donde sus causas duermen sin avance alguno", precisó.
Por último, resaltó que "no solo en las causas por derechos humanos aparece la foto patética de imputados declarando en condiciones físicas propias de su senectud".
En este sentido, dijo que también "en causas de corrupción la foto es de ancianos juzgados por hechos con antigüedades superiores a los 10 o 15 años, cuando detentaban y abusaban del poder".

Ana Grillo
Fuente DyN

1 comentario:

Rafael del Barco Carreras dijo...

Y en España...

LAS MONTERÍAS DE GARZÓN


Rafael del Barco Carreras


Una batallita. Corrían los 70 y por una “suspensión de pagos” afectando a la Caja General de Crédito Sociedad Cooperativa de mi dirección me adentré por primera vez en el ambiente Judicial. Que unos viejos empresarios y banqueros me aconsejaran no perder el tiempo porque de una “suspensión de pagos” jamás se cobraba nada, no alteró mi tozudez, aunque evidentemente no cobré. Pero conocí el submundo de las “suspensiones de pago” en Barcelona monopolizado por dos jueces, Carlos Lorenzo-Penalva de Vega y Joaquín García Lavernia, con base operativa una oficina de los hermanos Penalva, y regentada por un tal Vidal, condenado. Allí morían, se distribuían, se cobraba y se vendían todos los activos con los que en teoría deberían cobrar los pillados acreedores. Un gran negocio “judicial” las suspensiones de pagos, que iniciadas masivamente en la primera crisis del petróleo, 1973, aumentaron en progresión geométrica, aunque con cifras mucho más modestas que las actuales de la Burbuja Inmobiliaria, hasta después de muerto Franco, y las huelgas casi salvajes que siguieron. Pero a lo que iba, aguanté hasta alguna juerga nocturna del grupo, negándome en redondo a acudir a una de sus habituales capeas en una finca, con mansión y plaza de toros incluida, propiedad de uno de los dos jueces, cerca de Tortosa, donde terminaban sus razias puteriles.

Por lo visto y sabido el negocio duró décadas, aunque con excedencias de Penalva, ganaba demasiado dinero para no disfrutarlo con largas ausencias. Los dos jueces capos de las “suspensiones de pagos” barcelonesas acabaron en prisión. Los primeros y únicos en España con su “amigo” Pascual Estevill. Por el desmadre, fruto de su total impunidad, los denunciantes (unos cabreados acreedores y sus abogados que con lo de la Democracia pretendían limpiar los juzgados) se basaron en las propias cuentas corrientes para demostrar el “enriquecimiento ilícito”, prevaricación y cohecho continuos, y todos los imaginables delitos “conocidos y sabidos por el Todo Barcelona”. Por los 88, después de un suave paso por prisión con rápido “tercer grado”, fueron "contratados" (imperativo legal para terminar en libertad su condena) por el Bufete Piqué Vidal, ya de antes “en su órbita”. Así pues, por los 90, encontramos en el Bufete a los ex jueces Penalva y Lavernia, y a los jueces en activo, Adolfo Fernández Oubiña y Luis Pascual Estevill, por unos meses entre 1994 y 1995 delegado para Cataluña del CGPJ, o sea, dueño y terrorífico señor de todos los juzgados. ¡Y yo en prisión escribiendo mi primer libro contra ellos!, 1994. ¡Con razón no me concedieron ni libertad con fianza, ni permisos, ni tercer grado, hasta muy entrado el periodo de posible “condicional”! ¡Hace quince años yo estaba tan loco como ahora! Para más matices se deben añadir otros bufetes “asociados”, grandes bufetes, los poderosos “Jiménez de Parga” con 50 calaboradores, mi abogado acusador en el caso Consorcio, y actualmente, tras trece o catorce años de la primera denuncia, aun “supuesto” extorsionador.

Ignoro que fue de la finca, de las capeas y de sus continuas juegas nocturnas, pero lo que si intuyo por visto en la tele y por sabido desde mi juventud que en otros ambientes judiciales cambian las capeas por monterías. Las dos cuestan un pastonazo, el sueldo mensual de un juez ni entonces ni ahora alcanza para una sola sesión, ni menos para alimentar los adjuntos cortesanos o cortesanas.

Debo ser un ecologista sin conciencia de serlo porque nunca me han gustado ni los toros ni matar muflones. En otra ocasión, también por unas deudas en Yepes, me negué a cazar perdices en la finca de un tal Álvarez de Mendizábal. Que las criaran en gallineros y soltaran para dispararles, no es que me pareciera una salvajada, lo catalogué de otro de los tantos absurdos humanos.

Han pasado cuarenta años, el franquismo, la transición, izquierda o derecha… todo sigue absolutamente igual…sean muflones, vaquillas, o no cobrar en las suspensiones de pago o quiebras, el "consurso de acreedores" actual...y a peor…

Y me dirán ¿qué tiene que ver aquello con esto?... ¡ya llegaremos!… desde el 2006 Piqué Vidal está acusado de blanqueo de capitales en un sumario en la Audiencia Nacional, con amigos allí desde el nefasto juez Miguel Moreiras… otro conocido ex socio mío que pagó extorsiones a Pascual-Piqué lo está directamente por Garzón… por el momento ni de lejos hay juicio… y pasan los años…