BOLETA ÚNICA : EN LA CAJETA DE KK

Cristina cajonea desde hace un año un proyecto de boleta única
Lo presentó el senador Samuel Cabanchik en abril. El senador e íntimo asesor de Cristina, Nicolás Fernández, se comprometió a presentarlo a la presidenta pero nunca dio respuestas. Creen que ayudaría a evitar los manejos que se vivieron en 2007, sobre todo en el conurbano. El legislador de la Coalición Cívica da su opinión.

La Política Online

Aunque un grueso conglomerado opositor presentará en Diputados un proyecto para impulsar a nivel nacional la boleta única, El senador santacruceño e íntimo asesor de Cristina Kirchner, Nicolás Fernández, tiene cajoneado uno desde hace casi un año.

Aunque se había comprometido con el autor del proyecto, el senador de la Coalición Cívica Samuel Cabanchik, a presentárselo a la presidenta, nunca hubo novedades y desde abril duerme en el despacho de Fernández, presidente de la Comisión de Asuntos Constitucionales, donde reemplazó justamente a la jefa de Estado.

Según fuentes del Senado, Fernández decía que ya había enviado el texto a Casa Rosada y que esperaba el retorno de Cristina de su viaje –de alguno de ellos- para verificar si se había tomado alguna resolución al respecto. Sin embargo, a algunos días de retomar la actividad el Parlamento nada hay sobre el proyecto de Cabanchik.

Sin embargo, en el bloque de Elisa Carrió en la Cámara Alta, hay alguna esperanza aún. Creen que el poder político kirchnerista, “que define todo en una mesa no chica, chiquitísima”, podría doblegarse ante la presión. Esa presión le ven en Córdoba y Capital Federal.

En tierras mediterráneas, el oficialismo de Juan Schiaretti logró aprobar un proyecto de boleta única que será utilizado a partir de 2011. Dicen, que tomaron varios ejes del proyecto que tiene en sus manos Nicolás Fernández. A eso se suma la reciente comunicación de Mauricio Macri de empezar a activar también la boleta única en la ciudad.

Desde el entorno del senador cívico, cuentan que a Fernández le propusieron utilizar como plan piloto la boleta a nivel nacional en octubre con la elección a senadores. Esto sería simple, ya que sólo se eligen en ocho distritos y la lista de cada partido sólo presenta dos candidatos y algún suplente. Pero tampoco, hasta aquí, tuvo alguna respuesta.

Consultados voceros del Congreso para ver si dan los tiempos en tratarla y votarla en ambas cámaras para poder implementarla en octubre, explicaron con elocuencia: “Si en la apertura parlamentaria de este año Cristina dice que manda un proyecto de boleta única, ¿cuánto podemos tardar en tratarlo en ambas cámaras? En una semana lo tenés sancionado”.

“Es un sistema permeable a la trampa”

La Política Online dialogó unos minutos con Cabanchik, quien expresó su opinión sobre la instalación mediática de la boleta única, en formatos similares a los que el presentó en abril pasado en el Senado.

¿Cómo ve la implementación de esto en Córdoba y Capital?

Yo estuve en Córdoba y hablé con todo el justicialismo cordobés y hubo muchas coincidencias y nuestro legislador allí, Omar Ruíz, presentó nuestro proyecto. Después empezó a levantarlo mediáticamente Solá y otra gente y en algún momento a Macri le cayó la ficha. Igual, Martín Hourest había presentado uno propio en la Legislatura porteña también.

¿Lo va a favorecer el viraje político hacia el Congreso que se evidenció en 2008 y que seguramente se profundice este año?

Yo pienso: ¿Cómo le cuesta aprender de sus errores a los Kirchner, no? Este era un tema para que lo tomaran ellos y se pusieran a la vanguardia. Yo se lo dije a Nicolás Fernández. No entendía cómo un tema que es solamente calidad institucional, que puede ser perfectamente acordado con todo el mundo, el Ejecutivo no lo hace suyo.

¿No cree que la respuesta a esa pregunta es todo el escándalo que se vivió en octubre de 2007 en el conurbano, con robo de boletas y gente que se tenía que ir sin poder votar?

Por supuesto. Esto es el temor a perder ese control. Pero de todas formas, el poder se les hace agua de otras maneras, porque ahora se los está quitando la interna peronista, la opinión pública. Tener atado el poder por un sistema tan permeable a la trampa no te garantiza tampoco la continuidad en el poder.