" ANIBAL PIMPINELA" NOS CUIDA

Escándalo con la seguridad

Hoy la seguridad depende de Aníbal Fernández, ex intendente de Quilmes y ex prófugo de la Justicia durante su época de puntero duhaldista en el conurbano.

Por Viviana Retamar


La seguridad figura entre las principales preocupaciones de la ciudadanía. 6 de cada 10 personas refieren que han sido objeto de un hecho de violencia en el último año. El crecimiento del delito urbano se ha incrementado de tal modo, que han aparecido lugares, como en Tres Arroyos, en dónde los vecinos se arman y forman grupos de autodefensa civil.

Hoy la seguridad depende de Aníbal Fernández, ex intendente de Quilmes y ex prófugo de la Justicia durante su época de puntero duhaldista en el conurbano. De Fernández depende la Secretaría de Seguridad Interior de la Nación que coordina a la Policía Federal, Gendarmería, Prefectura Naval y Policía de Seguridad Aeroportuaria en la lucha contra el delito.

Al frente de la Secretaría de Seguridad, con un presupuesto millonario en dólares, se ha colocado a Héctor Masquelet del Centro de Estudios Legales y Sociales (CELS) que dirige Horacio Verbistky. Como Sub-Secretaría de Masquelet se ha designado, por orden de otro Fernández (Alberto) a una antigua camarada de Vilma Ibarra, Lía María, "experta en cerámica" y encargada por el afrancesado Jorge Telerman de ocuparse de la decoración de las plazas de Buenos Aires desde el Ministerio de Espacio Público durante su gestión.

De la Secretaría de Seguridad depende la Dirección Nacional de Inteligencia Criminal (DINICRI) un organismo técnico llevado a la práctica por los licenciados Luis Tibiletti y Ricardo Colombo a quienes Aníbal Fernández hiciera despedir luego que el Congreso de la Nación los distinguiera por integrar el grupo de jóvenes oficiales del Ejército denonominado "33 Orientales" que fueron dejados fuera de las FFAA por oponerse al Proceso militar.

Al frente de la DINICRI, Aníbal Fernández, ha designado a una vieja conocida del duhaldismo bonaerense, la Fiscal de la zona sur Verónica Fernández Sagari, quién se ha dedicado a desmantelar el organismo echando al personal profesional ingresado por concurso público. A tal extremo llega el encarnizamiento con el área que hasta se ha dejado en la calle a mujeres embarazadas y hasta el hijo de uno de los militares fusilados en 1956 por Aramburu y Rojas, el Coronel Ibazeta.

La DINICRI tenía por finalidad coordinar el esfuerzo nacional de las fuerzas de seguridad haciendo inteligencia sobre el delito, su incidencia etaria, zonal, modalidad, etc. De tal modo, con información recolectada de los distintos organismos debía elaborar el "Mapa del Delito" para que el Ministerio pueda ordenar a las fuerzas de seguridad las políticas respectivas.

Hoy nada de eso se hace y se limita a nombrar y nombrar nuevas personas reemplazando a los profesionales terciarios que ingresaron por concurso habiéndose abandonado todas las investigaciones puntuales que habían ordenado sus antiguos responsables Tibiletti y Colombo, especialmente las que tienen vinculación con las mafias de los desarmaderos en el gran Buenos Aires y con los carteles de la droga y su incidencia en la juventud.

En su reemplazo, Aníbal Fernández ha puesto a la psicóloga marxista Eva Giberti que se encarga de "Violencia contra la Mujer" dedicándose de modo full time al adoctrinamiento en "cuestiones de género" focalizadas en la visión rabiosa del feminismo extremo.

Mientras tanto, la inseguridad sigue creciendo y se siguen dilapidando los impuestos que sufridamente pagamos.


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