jueves, 28 de abril de 2011

EL VERDADERO PRESIDENTE


ELECCIONES 2011
Hipótesis: Zannini, candidato a vicepresidente

Carlos 'El Chino' Zannini es secretario legal y técnico de la presidencia desde 2003 y mano derecha de Cristina Fernández, quien le confía como a nadie la marcha de su gobierno. Es uno de los armadores políticos del Gobierno que no ha demostrados habilidades en la materia, por lo que para rescatar su confianza (quizás sea el único capaz de garantizar la lealtad que la presidente quiere a su lado) lo colocarían como candidato a vicepresidente y tal vez, como sucesor natural. Esta es la versión que dejó correr el sitio 'La Política Online':

CIUDAD DE BUENOS AIRES (La Política Online).- Cuando Néstor Kirchner era la máxima figura del poder político y esposo de la presidenta de la Nación en los circuitos oficialistas había una broma frecuente: ¿Si se separan con quién se queda “El Chino” Zannini?

Kirchner murió hace seis meses y Carlos Zannini, secretario Legal y Técnico de la Nación desde que el santacruceño llegó a la Presidencia, acentuó su poder y se consolidó como la mano derecha de Cristina en la elaboración de iniciativas de gestión y en los armados políticos.

Para un nuevo mandato, Zannini podría continuar con las mismas tareas desde otro rol: el de vicepresidente de la Nación si es que, como se menciona en la primera línea de Gobierno, se convierte en el compañero de fórmula de Cristina Kirchner y triunfan en los comicios de octubre.

En la Casa Rosada se repite que la Presidenta completará el binomio con alguien de su máxima confianza que garantice lealtad y que sea el sucesor natural.

Y los nombres que se mencionaron fueron varios: desde el gobernador de Chaco, Jorge Capitanich, hasta Juan Abal Medina y los ministros Amado Boudou y Julián Domínguez.

Además de la buena sintonía actual con la presidenta cada uno tiene condiciones que pueden aportar a una fórmula pero ninguno la intimidad que conserva Zannini con la jefa de Estado, que lo convertiría en su único sucesor sumamente fiel.

Además, Zannini ya es en los hechos el número dos del gobierno y logró desplazar del cícrulo de decisión a su eterno rival desde los tiempos en que hacían política en Santa Cruz, el hoy opacado ministro de Planificación, Julio de Vido.

Como vicepresidente, por ejemplo, cuando la presidenta estuviera de viaje Zannini debería firmar los decretos que él mismo escribe sin consultar a nadie más que a ella. La duda es si la tarea de presidente del Senado no lo alejaría de la gestión día del Ejecutivo.

Pero si el kirchnerismo amplía la mayoría que ya tiene en el Senado, no sería necesario que presida las sesiones, tal como le exige su cargo e hicieron Daniel Scioli y Julio Cobos; ya que su voto no sería decisivo y podría derivar esa tarea en el presidente Provisional de la cámara alta, cargo que hoy ostenta José Pampuro.

Nacido en Córdoba pero compañero de ruta de los Kirchner desde aquel primer triunfo en la intendencia de Río Gallegos en 1987, hasta ahora nunca desempeñó un rol electoral clave sino más bien que ofició siempre de discreto "armador" de espacios y candidaturas.

En el 2005, Kirchner lo mandó monitorear la creación de la agrupación Compromiso K. Este selló le permitió reclutar dirigentes por todo el país y fue la punta de lanza para iniciar la famosa "Concertación" con los radicales.

Pero desde la muerte de Kirchner, el secretario Legal y Técnico se úbicó en la cúspide del armado político kirchnerista, siendo en los hechos la voz de la Presidenta en las infinitas negociaciones que por estas horas se irradian desde la Casa Rosada, para asegurar un triunfo en octubre.

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