domingo, 20 de enero de 2008

CHÁVEZ SE LA COME?????

La homosexualidad reprimida de Hugo Chávez es un tema de candente actualidad. El artículo de Luis María Anson conminando al bolivariano a salir del armario, sólo fue la gota que colmó el vaso. O dicho más a la cubana, fue lo que le puso la tapa al pomo.Pero el asunto, desde mucho antes, era la comidilla en todos los mentideros de Caracas, muy especialmente entre los de la izquierda gay, que ven en Chávez a uno de los suyos. Y lo admiran como a un ídolo homoerótico.Son los propios venezolanos los que aseguran que el bolivariano lleva en su alma la bayamesa. Unos lo comentan con admiración; otros, por el placer de buscarle la pluma al militarote payasón; y la mayoría, en plan bochinche.Al final, da lo mismo cuál sea la orientación sexual de un hombre o una mujer. Hoy en día eso es lo de menos.Nadie debe ofenderse, como Chávez se ha ofendido, porque la gente piense que tiene cosas de mariquita. Ser gay ya no es un estigma.Al contrario, más bien es una gracia. Ahora ser heterosexual es lo que no se lleva, lo que está fuera de moda y lo que no es in. El otro día vi por televisión a un joven madrileño que casi se disculpaba por no ser homo y no estar en sintonía con la última onda del socialismo español según Zerollo, paladín del orgullo gay.En todo caso, Chávez sería bi, que es como decir zurdo y derecho a la vez, o sea, ambidiestro. Puede que le gusten algo las nenas, no hay que dudarlo, pero los chicos le gustan también. Y parece que le gustan más.Al menos eso es lo que aparenta, sobre todo después de haberlo visto dulcemente cogido de la mano con el amor de su vida, el Patriarca convaleciente de varias operaciones colo-rectales y hemorragias anales incontenibles.Aquello parecía una escena de 'La dama de las camelias'. Qué tierno se veía Chávez con el macho de su vida, el que lo vuelve loco, el que lo desordena y lo descontrola. Para qué decir más, al coronelito el que le rompe el coco es sin duda el Comandante, que hoy es un coma yacente.Lo condenable en el Gorila Rojo no serían en todo caso sus tendencias sexuales ambivalentes, sino sus tendencias tiránicas polivalentes. Y lo mismo cabe decir de Raúl Castro, que siempre tuvo fama de ser mariconcito, incluso entre destacadas figuras del régimen castrista. Cosa que tampoco a mí me importa mucho y si lo comento aquí es porque ese rumor siempre ha sido vox pópuli en toda Cuba. Y el pueblo tiene el derecho de conocer a sus dirigentes.Yo creo, por otra parte, que más vale que Raúl hubiera salido a tiempo del clóset y se hubiera realizado encontrando su verdadera vocación como loca rampera, en vez de haber sido tan hachepé y tan asesino. Y luego, ¡tan homófobo!En un final, la mayoría de los chistes sobre la verdadera orientación sexual de Raúl o Chávez son pura gozadera. Lo mismo que el artículo de Anson, escrito en en son de guasa. Vaya, cosas de bromistas.Chávez no se la llevó y dio una respuesta tan airada como ridícula afirmando que él es muy pero que muy macho. Sólo que un puro machote de verdad nunca tendría que verse en la necesidad de aclarar que es macho-varón-masculino, como decían por si las moscas los aprendices de guapos de mi barrio habanero. Dime de qué alardeas y te diré de qué pata cojeas.Por otro lado, un jefe de estado que no guarda la debida compostura y dignidad de su cargo, que además se pone a cantar rancheras por televisión y a hacer todo tipo de payasadas, indudablemente se expone al rechazo y a la maledicencia. En un país machista, como Venezuela o Cuba, la venganza en plato frío es llamarle maricón al gobernante de turno.Decirle tirano a Chávez no le resultaría tan ofensivo. Eso hasta le agrada al bolivariano neopopulista que no se cansa de ofender con los peores epítetos a todas las personalidades internacionales que le disgustan o lo critican, incluyendo a presidentes latinoamericanos. El desquite lo halló un periodista español que le tocó el punto débil al tiranuelo procastrista.Cayó como Timba en la trampa. ¿Cuándo se ha visto a un gobernante serio responder a las bromas de un periodista? Luis María Anson logró su objetivo: cabrear al cabroncito de Hugo Chávez. De lo mucho que me alegro.
Publicado por ALEXIS MARRERO

1 comentario:

El Cerrajero dijo...

Aspecto de gorila pajillero, al menos si que la tiene.