domingo, 24 de abril de 2011

PAPELÓN............


DE PAPELÓN EN PAPELÓN, NOS QUEDAMOS SIN NACIÓN

Por Malú Kikuchi


Papelón: actuación deslucida o ridícula de alguien. DRAE. En “Viajes por Europa, África y América” (1845/1847), Sarmiento decía, “del ridículo no se vuelve”. Sin lugar a dudas es cierto en todas partes… salvo en Argentina. Acá se vuelve de todo, hasta del ridículo.

De parte del gobierno que hemos sabido conseguir, esperar papelones es una constante. Estamos acostumbrados. Lo terrible es que los partidos de la llamada oposición salen a competir por el papelón mayor, y hay momentos en que corren con ventaja.

Papelones Moreno. Los hace siempre, desde la época de la pistola sobre la mesa de negociaciones, hasta los guantes de box (de juguetería) en la reunión con los accionistas de Papel Prensa. Sin olvidar las inverosímiles y mensuales cifras del INDEC.

Papelones Garré. La ministro de seguridad, Nilda Garré, para jorobar a Macri (y de paso a todos los ciudadanos de CABA), so pretexto de poner más policías en la calle, desprotege hospitales y escuelas.

Escuelas: hay que inventar un corredor policial para estudiantes de colegios de Recoleta y Palermo, ya que son robados por menores delincuentes. Hospitales: médicos y enfermeras son agredidos y robados por individuos que buscan droga. Un paciente en la sala de guardia del Santoiani, fue apuñalado.

Seguridad en las calles. El desproteger edificios que dependen del gobierno de la ciudad se hace para aumentar la fuerza policíaca en las calles. El 19/4/11, la hija de Garré fue a visitar a su madre a su casa de Palermo. Estacionó el auto en la calle, frente a la casa. Al salir, comprobó que le habían robado 3 de las 4 cubiertas del auto.

Papelones Aníbal. Argentina tiene el honor de recibir a Mario Vargas Llosa, escritor peruano, reciente premio Nóbel de literatura y a Fernando Savater, gran pensador español. Savater habla en una escuela de Villa Ballester, Vargas Llosa lo hace en la feria del libro. Con educación, con delicadeza, y ejerciendo su derecho a la libertad de expresión, critican la actuación del gobierno.

El jefe de gabinete de ministros, el locuaz, bocón dirían en su barrio de Quilmes, Aníbal Fernández, no encuentra nada mejor que ordenarles a Savater y a Vargas Llosa, “dejar de decir estupideces”. Además, en un gesto que deshonra la libertad de expresión, consagrada por la Constitución Nacional (que juró defender el ministro), los manda ocuparse de sus cosas y no de las nuestras.

Papelones cercanos al mundo K. Mamá Hebe, “la madre de todos los argentinos”, según Kirchner ante la asamblea de la ONU (2003), dijo que “sus hijos viven en el corazón de Amado Boudou y de Felisa Miceli”. Desconcertante.

Aclarando, Boudou fue afiliado a la UCeDe, se recibió en el CEMA, cuna de los liberales argentinos y Felisa Miceli, oscura y nada memorable ministra de economía, es recordada por olvidar en el baño de su oficina una bolsa con + de US$ 60.000 y otras monedas. ¿Esos corazones son el mejor lugar para que vivan los hijos de mamá Hebe?

Papelón tras papelón, nos vamos quedando sin nación. El gobierno hace lo suyo, pero la oposición no se queda atrás.

Papelón UCR. El partido que nació hace 116 años para combatir el fraude conservador, el partido apóstol de las internas, presenta 3 candidatos: Alfonsín. Cobos y Sanz. Cobos, al presentarse Sanz, se baja de la interna y dice que espera hasta las obligatorias de agosto. Sanz hace un lanzamiento inmejorable, moderno, promisorio.

De pronto, Sanz se baja de la interna con Alfonsín, programada para el 30 de abril. Teme que el aparato del partido haga fraude. ¡En la UCR! Alfonsín queda solo. Entonces, el partido más ortodoxo con respecto a los reglamentos partidarios, los deja de lado y nombra a Alfonsín candidato por la UCR. Sin esperar las primarias de agosto. Cobos dice que no se presenta. Sanz no sabe si se presenta en agosto.

Papelón PJ Federal. Al principio lo conformaban Das Neves, Felipe Solá, Duhalde, Adolfo y Alberto Rodríguez Saa, Reutemann, Ramón Puerta, Juan Carlos Romero y otros muchos. Primero se bajó de la posible interna, Reutemann. Que había el primero en decir que quería ser presidente. Felipe Solá dio un paso al costado. En 2007 había conformado una terna exitosa con Macri y De Narváez. Fue.

Luego del papelón de la elección en Chubut, hace más de un mes y todavía no hay certezas sobre el ganador (en Brasil, algo más grande y poblado que Chubut, el resultado de la elección se conoció en escasas 3 horas), Das Neves se bajó. Todos se fueron haciendo a un lado y quedaron sólo Alberto Rodriguez Saa y Duhalde. El proyecto era difícil, novedoso, encomiable en un partido verticalista como es el PJ.

Después de la interna en capital y en el NEA, todo se pudrió. Escuchamos las razones de los dos contendientes y lo importante es que la interna, murió. Lo calificó de papelón el propio Duhalde. Su mujer, Chiche, dice, “no somos serios”. Es cierto.

Papelón PRO. La interna entre Gabriela Michetti y Rodríguez Larreta, para ver quien va a ser el candidato a la ciudad, la decide Macri. El problema es que Mauricio quiere ser candidato a presidente de la nación, y todavía no sabe si va a conformarse con ser otra vez candidato a la ciudad. Deshoja la margarita.

Papelón Proyecto Sur. Pino Solanas, al igual que Macri, quiere la nación, pero seguro que se presenta en la ciudad. Eso después de haberle enrostrado a su candidato para la ciudad, el economista Claudio Lozano. que medía mal (entre 2 y 3 puntos), a lo que le contestó Lozano que Pino medía horrible para la nación (4,2). Desde entonces, Libres del Sur, partido aliado a Pino, juega con la posibilidad de abandonarlo por el GEN o por Sabatella (este último, kirchnerista). ¿Y los cacareados principios de la izquierda? ¿Qué son los principios?

Papelón Socialista. Binner es una incógnita. ¿Está en contra del gobierno nacional o más o menos? No se sabe. En su provincia, donde no hay reelección, apoya a su ministro de economía, Antonio Bonfatti, pero su correligionario Rubén Giustiniani está mucho mejor en las encuestas. Si gana Giustiniani la provincia, o saca más votos que Bonfatti, pierde Binner.

Quizás porque ya hizo muchos papelones, cuando como Casandra auguraba los males que hoy nos aquejan, antes de que ocurrieran, la Coalición Cívica de Carrió, a fuerza de incoherencias, es coherente. Se mantiene firme. Los candidatos caen a su alrededor. Esperará hasta último momento para ver con quien cierra y cuales son sus límites reales.

Papelón surtido. A Binner lo quiere de vicepresidente, Alfonsín; lo quieren para cualquier cosa, el GEN de Stolbizer y los partidos de la izquierda desunida. De Narváez, candidato a gobernador de la provincia de Buenos Aires, el hombre que le ganó a Kirchner, ¿a qué candidato a presidente va a apoyar? Nadie sabe quien va con quien. A pesar de la recurrente frase “mi límite es…”, la necesidad de llegar a acuerdos es perentoria. Pero, los acuerdos no llegan. Los políticos no aprenden a sumar. De seguir así, Cristina gana en primera vuelta.

¿No será que en el fondo ninguno de los líderes de la oposición quiere realmente hacerse cargo de la bomba de tiempo que va a dejar este gobierno, entre subsidios, tarifas, incumplimiento de contratos, dólar atrasado, falta de respeto por la ley, ausencia de instituciones? ¿No será que pretenden, muy en el inconciente, que esta vez la bomba le explote al que la armó?

O será que entre papelones de uno y otro lado, la nación se desvaneció y a nadie, salvo a los que les peligra la libertad y los bienes mal adquiridos, le importa demasiado “esto” que alguna vez fue nuestra Argentina?

En agosto votamos primarias obligatorias., En octubre votamos en elecciones generales. Entre papelones, ¿Usted ya sabe a quien va a votar? ¿O es de los que saben a quien NO va a votar? Y no me diga que todavía no hay candidatos definidos, porque eso también es un papelón. ¿Será Cristina candidata?

1 comentario:

Anónimo dijo...

Estos señores no hacen papelones; se trata de un montaje donde cada uno hace su papel.
Estos señores están legitimados por un sistema electoral donde basta sacar más votos (que cuentan ellos) para adquirir la suma del poder, para hacer y deshacer todo, incluidas no solamente las promesas electorales, los intereses argentinos, el bien común, sino la Patria misma. Toda ley, humana, natural, divina; en el marco de esto que llaman democracia. Esto Democracia que es un modo de convivir, de creer, de pensar; que encierra un misterio de felicidad, a través del cual un día podremos alcanzar una libertad omnímoda y total, cual sacramento, si seguimos votando. Eso sí, sin equivocarse, porque “si nos va mal es porque no sabemos votar”, aún sabiendo muy bien quienes son los malos, señalados permanentemente por los medios críticos y tanto comedido que escribe notas en la blogósfera, que apuestan en el mejor de los caso hacerle bien a la Democracia.
Eso sí, si caemos en la cuenta del engaño, debemos aguantar cumpliendo con las reglas de juego tratando de aprender a votar para la próxima vez. ¡Nos falta tanto ejercicio democrático!, claro, con tantos golpes…..
Estos personajes no hacen papelones, hacen una parodia de gobierno mientras cumplen exitosamente un programa de demolición de la Argentina perfectamente orquestado y tutelado por quienes tienen objetivos más bastos.
Los personajes están bien elegidos y caracterizados: un loco que rompía todo dividiendo para reinar, y que soportamos porque un cáncer de colon (información funcional perfectamente dosificada) se lo iba a llevar, o porque siendo tan ladrón otro poder del estado le iba a poner coto. Una bipolar que no gobierna bien porque vive de compras, un cínico que dice cualquier mentira, etc., y todo en un marco que se explica con el setentismo por el que se admite la demolición sistemática de la defensa nacional, la seguridad ciudadana, la formación de milicias, la educación gramsciana etc.
En el mismo sentido, los otros poderes del estado y la oposición están claramente modelados en el mismo espíritu para hacer su papel actuando funcionalmente tras los mismos objetivos. Y la clerecía vernácula, a su modo, otro tanto.
Es imposible defender la Argentina sin reconocer la existencia de una agresión, sin reconocer la naturaleza y alcance de esa agresión, sin reconocer al enemigo, sin reconocer sus armas.
Señora: los gerentes de la demolición argentina no hacen papelones, aunque así lo sugiera su apariencia de impresentables.
R I Agüero