A PATADAS EN EL CULO !!!

Estamos transitando una Argentina donde una minoría impone su voluntad por sobre la mayoría inerte, absorta y pelotuda, circunstancia que no deja de ser toda una originalidad, penosa por cierto. Si como muestra basta un botón, recuerde la sanción de la Ley que hace posible el matrimonio entre personas del mismo sexo. ¡Ya sé que se sancionó en Senadores por simple mayoría, pero también sé que el pueblo mayoritariamente Católico, no aprobaba ni aprueba dicha sanción!. Pero le voy a citar otro botón, distinto pero igualmente penoso. Un grupo minúsculo de pendejos debidamente aleccionados, se toma la atribución de tomar un colegio y negar el acceso a sus supuestos pares, que pretenden ingresar para cumplir con el ciclo obligatorio y no obligatorio…¡también a los padres de éstos!, y a todo aquel que pretenda acceder a ese colegio. Como reza aquella famosa frase, “la culpa no la tiene el chancho, sino quien le da de comer”, y a éstos pendejos, hay evidentemente quien les da de comer y sobradamente. ¡Claro!; esta situación, impensada hace no tantos años, se habría resuelto en el mismo día. ¿Cómo me pregunta?; simplemente ¡sacándoles a patadas en el culo! Así como crudamente se lo digo y como Ud. bien lo sabe, salvo haya sido parido por un repollo, frase que ensayaban algunas viejas de la época…de la época en la que su hijo y el mío cursaban el ciclo primario y secundario… ¡no le hablo de la época de las Cruzadas!...¡tampoco de la época de los militares!, y le hago ésta última salvedad, porque está de moda embocarles en cualquiera situación que implique “abuso de autoridad” o “represión ilegal”. Entre paréntesis, aprovecho para recordarle, así ya lo haya intentado, que la palabra represión, según el diccionario, merece una sola acepción…”restablecer el orden”. ¡Ahora Ud. me dice que estoy haciendo la apología de la “sacada a patadas en el culo”…puede que tenga razón, es más, lo admito, no sin recordarle que la “sacada a patadas en el culo” en sí, no constituye delito. Sí en cambio constituyen delito, una serie de prácticas que se llevan a cabo desde el mismísimo gobierno nacional, como por ejemplo, toda aquellas que reúnen los ya recurrentes hechos de corrupción, enriquecimiento ilícito, incumplimiento de los deberes de funcionario público, incitación a la violencia, desacato, un Gobernador que admite no poder actuar contra el delito por “estar atado de manos” (???). El resto memorícelo Ud., y hágase cargo de la arcada o el vómito que le provoque.

Ahora lo dejo, no sin antes aclararle y para su tranquilidad, que “la sacada a patadas en el culo”, en lo personal, la llevaría a la práctica sin zapatos y con medias de algodón.

Ricardo Jorge Pareja

parejaricardo@hotmail.com