VELAS PARA LA REINA KRISTINA

Politica

-Se profundizan los cortes de luz y Cristina de Kirchner sigue sin hablar
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Tramos enteros de la Avenida Libertador al igual que varias zonas del conurbano permaneces a oscuras. En Capital hay cortes en Caballito, Liniers, Mataderos, Villa Urquiza y Belgrano, entre otros barrios. La Presidenta regresó hoy de sus vacaciones y se encerró en la Quinta de Olivos.
Ni una palabra. Esa es la posición que adoptó el gobierno mientras en muchos barrios de la Capital Federal y varias zonas del conurbano continúan los cortes de luz que afectan a miles de usuarios. Hoy todo se sintió el doble, cuando la temperatura llegó a los 42 grados de sensación térmica.
Algo queda claro por lo afirmado tanto por las empresa proveedoras de energía eléctrica como por el Ente Nacional Regulador de la Electricidad (Enre): el abastecimiento de energía del país -y más notorio aún en el área metropolitana- no depende del Ministerio de Planificación, Edesur o Edenor, sino del clima. O al menos esa es la excusa esgrimida.
Los voceros de las empresas y el Enre coincidieron en explicar hace algunos días, cuando se dieron los primeros cortes masivos de luz, que todo se debía a una “creciente demanda” por las “excepcionales temperaturas”. Esas temperaturas se repiten y, por lo tanto, también los cortes.
Esta noche La Política Online confirmó cortes de luz en la zona norte en Acassuso, San Isidro y Vicente López, y en distintos barrios porteños como Caballito, Villa Urquiza y Belgrano. En la zona norte tramos larguísimos de la avenida Libertador permanecían a oscuras.
Por la mañana se registraron los primeros cortes en la zona norte del conurbano, donde hubo cerca de 3 mil damnificados. A esos se suman otros casos en la Capital Federal y el sur del conurbano bonaerense.
En ese marco, sugestivamente la Casa Rosada adoptó una posición ajena. Ninguno de los habituales voceros hace referencia al asunto y la presidenta Cristina Kirchner, quien hoy volvió al puesto que obtuvo en las elecciones del 28 de octubre después de unas sorpresivas vacaciones, a días de haber asumido, no mantuvo ni una sola reunión con los sectores gubernamentales encargados del asunto, ya sea el Ministerio de Planificación o el propio Enre.
El propio Julio De Vido, a horas de ser reconfirmado en el cargo por la mandataria electa, apuró algunas palabras para tranquilizar la cuestión e incluso arriesgó definiciones dando el asunto por terminado, como que “el secreto de que no hayamos tenido la crisis tan largamente anunciada estuvo en que, en vez de dedicarnos a contestar, nos pusimos a trabajar”.
“Frente a este escenario –siguió De Vido-, en el marco de conversaciones muy serias que tuvimos con todos los actores del sector, llevando adelante obras tales como los gasoductos, las centrales térmicas, Yacyretá y Atucha, que estaban paradas, hoy podemos estar como estamos". Claro, casi todas obras frenadas por resonantes casos de corrupción.
A los pocos días, se lanza el Plan de Uso Racional de Energía. La preocupación que se escondía detrás de la pública tranquilidad se vio en algunas medidas, como la compra de 25 millones de lámparas de bajo consumo o el traspaso de la presidencia de la Compañía Administradora del Mercado Mayorista Eléctrico S.A (CAMMESA) de la Secretaría de Energía al Ministerio de Planificación, con el decreto 172/07.
La jefa de Estado achacaba las medidas de racionalización al “modelo imperante” de los años noventa, que según dijo “no requería energía”. Algunas fechas más adelante, los cortes de luz le propinaron el primer cacerolazo de su gestión.Fuente: La Política Online