KRISTINA COMIENDOSE LA BALA

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08:19
Ridículo: Viajar en Argentina es un caos, pero Cristina firma el contrato por el tren de alta velocidad a Córdoba
Se frustró el intento del gobierno por avanzar hacia la faraónica idea de contar con un tren bala hacia Mar del Plata -proyecto que planeaba anunciar hoy la Presidente y que debió postergar hasta febrero-, sin embargo sigue adelante con la firma del contrato con la firma francesa Alstom para que construya un tren que unirá las provincias de Buenos Aires y Córdoba, pasando por Rosario. La crisis energética. Hoy, viajar en tren o avión es una verdadera odisea.
La presidenta Cristina Fernández de Kirchner firmará este miércoles, junto con el ministro francés de Transporte, Dominique Bussereau, la adjudicación oficial del contrato para que la empresa Alstom construya un tren de alta velocidad que unirá las provincias de Buenos Aires y Córdoba, pasando por Rosario. Así lo informó ayer la embajada de Francia en un comunicado.
Alstom lidera el consorcio Veloxia -integrado también por el español Grupo Isolux y las argentinas Iecsa (Grupo Socma) y Emepa, concesionaria de la Hidrovía-, el único que se mantuvo en el proceso licitatorio para la adjudicación del contrato estimado en US$ 1320,5 millones. El plazo de construcción previsto es de entre 30 y 36 meses.
El anuncio sucede cuando el gobierno postergó ayer hasta febrero del acto de presentación de ofertas para el proyecto denominado "Tren de Alta Velocidad", que unirá la Ciudad de Buenos Aires con Mar del Plata en dos horas y media, iniciativa que puso en marcha en octubre pasado el ex presidente Néstor Kirchner y que debía haber sido lanzada hoy por su esposa Cristina Fernández, según informa Ambito Financiero.
Sucede que ayer cientos de pasajeros que permanecieron varados por más de cinco horas a la altura de Castelli por el desperfecto que sufrió una de las máquinas del convoy que loss trnsportaba a la ciudad balnearia.
Los ridículos anuncios suceden en momentos en que el país se enfrenta a otro tipo de necesidades más urgentes, como la escasez de energía o las malas condiciones de las rutas en las que mueren a diario decenas de personas, la odisea de viajar en tren o en cualquier medio de transporte